Julio fue uno de los meses más letales para los migrantes en más de una década en el desierto de Arizona, donde fallecieron 42 personas en su intento por cruzar la frontera desde México, según un reporte de Fronteras Compasivas.
“Sin duda julio fue un mes trágico para nuestros hermanos migrantes”, dijo Dora Rodríguez, directora del grupo, que lleva un detallado registro de las muertes de migrantes en la frontera de Arizona desde 2007, a EFE.
De acuerdo con el reporte de este grupo, durante julio pasado se reportó la muerte de 42 personas en la frontera entre México y Arizona, superando los 31 fallecimientos reportados en el mismo mes de 2022.
También es la cifra más alta en más de una década reportada durante el mes de julio, solamente superada por los 57 fallecimientos reportados en julio de 2010 en la región fronteriza de Arizona.
En lo que va de 2023 se ha reportado la muerte de 109 migrantes en ese sector, según los datos de la organización.
Estas cifras están basadas en datos proporcionados por la Oficina del Médico Forense del condado de Pima al grupo Fronteras Compasivas.
“Son varios los factores que están interviniendo para este incremento en muertes”, advirtió Rodríguez.
Durante julio pasado el estado de Arizona enfrentó una histórica ola de calor extremo, reportándose temperaturas sobre los 43 grados.
A las altas temperaturas se suma el continuo flujo de migrantes indocumentados, el cual no cesa a través del desierto de Arizona, lo que se ha convertido en una letal combinación, ahondó la activista.
“La falta de oportunidades para que los migrantes puedan presentar sus casos de asilo está ocasionando que cada vez más personas y familias enteras arriesguen sus vidas”, agregó Rodríguez, quien teme que el deceso de migrantes se mantenga en números altos si no se cambian las restricciones impuestas por el Gobierno del presidente Joe Biden en mayo pasado.