Puerto Rico sufrió graves inundaciones y cortes generalizados de luz debido a las copiosas lluvias que trajo la tormenta tropical Ernesto, que se convirtió en huracán categoría 1 al pasar al norte de la isla.
Las precipitaciones provocaron que todos los ríos de la isla quedaran “cerca o sobre su nivel de desbordamiento”, según dijo en rueda de prensa el meteorólogo Ernesto Morales, del Servicio Nacional de Meteorología (SNM).
La agencia meteorológica advirtió desde el inicio de la jornada de inundaciones repentinas en la mayor parte de Puerto Rico y pronosticó acumulaciones totales de lluvia de entre 15 y 25 centímetros.
Inundaciones obligan a desalojos
Una de las zonas más afectadas fue la norteña Toa Baja, en la desembocadura del río La Plata, donde las autoridades tuvieron que desalojar a varias familias debido a que el agua llegó a las viviendas de barrios como San José.
El inspector Robert Ramos Rosario, director del Cuerpo de Investigaciones Criminales del área de Bayamon, explicó a EFE que se cerró la carretera 2 por seguridad de los ciudadanos a causa del desbordamiento del río.
“Cada vez que hay un evento atmosférico esto ocurre porque el río viene desde la zona montañosa de Barranquitas, Comerío, Cayey y Naranjito, y desemboca aquí”, lamentó.
La mitad de la isla a oscuras
Las lluvias y las fuertes ráfagas de viento tuvieron su efecto en la débil red eléctrica de la isla. Un total de 734,645 clientes, el 50.04%, están sin luz a las 5 de la tarde (hora local), según los datos de la empresa LUMA Energy.
El gobernador de Puerto Rico, Pedro Pierluisi, urgió en conferencia de prensa acción a LUMA Energy, aunque reconoció que es «difícil» saber cuándo se restaurará el servicio ya que los operarios están ahora en la calle evaluando los daños.