Las voces de la comunidad palestina en Estados Unidos y el sufrimiento de sus familiares en la Franja de Gaza se quedaron oficialmente por fuera del escenario de la Convención Demócrata, que termina este jueves.
A pesar de la presión de casi una decena de congresistas demócratas y de un importante sindicato de trabajadores del automóvil, el partido decidió no dar marcha atrás a su decisión de rechazar el pedido de una minoría de 30 delegados para que una persona palestino-estadounidense hablara en el cónclave del partido.
“Hay fuerzas dentro del liderazgo demócrata que no quieren que hablemos sobre los derechos humanos de los palestinos. Pero nosotros lo haremos (…) la gente en todos lados está diciendo: ¡Palestina libre!”, escribió el grupo de 30 delegados que representan a los votantes que decidieron no apoyar a la vicepresidenta Kamala Harris en rechazo al apoyo estadounidense a Israel.
El conflicto en Gaza logró, sin embargo, colarse en el cónclave demócrata, contradiciendo la imagen de unidad que busca proyectar el partido y demostrando cómo la guerra en Gaza se ha convertido en un punto débil para la candidatura de Harris de cara a las elecciones de noviembre.
Los líderes del grupo de delegados “no comprometidos”, contaron hoy en una rueda de prensa que, tras casi 2 meses de negociaciones, el Comité Nacional Demócrata rechazó su petición de incluir una voz palestina en el escenario.
En la noche del miércoles, hablaron los padres de un estadounidense que fue tomado como rehén por el grupo terrorista Hamas durante el ataque del 7 de octubre, el cual provocó el recrudecimiento del conflicto en la región y una dura respuesta por parte de Israel, que ya deja más de 40 mil muertos en la Franja de Gaza.
En la emotiva intervención, los padres de Hersh Goldberg-Polin pidieron el fin del conflicto en Gaza y dijeron que “hay un exceso de dolor en ambos lados en este trágico conflicto”.
Una serie de congresistas progresistas, incluyendo la legisladora Alexandria Ocasio-Córtez, expresaron en redes sociales su apoyo a las peticiones de los delegados propalestina, insistiendo en que el partido debe darle voz a ambos lados del conflicto.
“Al igual que honramos la humanidad de los rehenes, debemos también centrarnos en la humanidad de los 40 mil palestinos asesinados en los bombardeos israelíes”, escribió Ocasio-Córtez, quien dio un apasionado discurso el primer día de la convención, dando un espaldarazo a Harris desde el ala más a la izquierda del partido.
El congresista Chuy García, quien representa parte del área de Chicago en la Cámara Baja, recordó en un mensaje similar que la ciudad es el hogar de “una de las mayores comunidades palestinas en todo el país”.
Frente a una de las entradas principales del estadio, los 30 delegados colocaron una pancarta que pide el fin al envío de armas a Israel y escribieron con tiza en la acera mensajes en apoyo a los territorios palestinos.
Israel es uno de los principales aliados de EUA y recibe más de 3,800 millones de dólares en asistencia militar.
En el programa electoral para los próximos cuatro años, los demócratas reiteraron la postura tradicional del apoyo a Israel, al mismo tiempo que respaldaron un “acuerdo de alto al fuego inmediato y duradero para Gaza”.