Rafael Grossi, director general del OIEA, viajará a Ucrania la próxima semana para evaluar el impacto de los acontecimientos más recientes en la central nuclear de Zaporiyia, controlada por Rusia.
Así lo informó el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) en un comunicado en el que recuerda que la seguridad de la citada planta atómica, la más grande de Europa, “sigue siendo precaria”.
Será el quinto viaje de Grossi a la instalación desde que el OIEA, la agencia nuclear de la ONU, estableciera allí una misión permanente hace 2 años, el 1 de septiembre de 2022, para velar por la seguridad nuclear.
“Sigo decidido a hacer todo lo que esté a mi alcance para proteger la seguridad nuclear mientras continúen los combates”, afirma el diplomático argentino en la nota.
El pasado 19 de agosto, el OIEA advirtió de un deterioro de la situación en la central de Zaporiyia tras impactar en sus cercanías un dron con carga explosiva, y después de que un incendio causara daños importantes en una de sus 2 torres de refrigeración.
El equipo del OIEA estacionado allí ha seguido oyendo explosiones y otros indicios de actividades militares.
Aunque sus 6 reactores están en parada fría, la planta sigue afrontando grandes riesgos, según el OIEA.