Decenas de trabajadoras y trabajadores del Poder Judicial de la Federación (PJF) salieron a manifestarse en la Plaza Bandera Nacional, que se ubica entre los Palacios Legislativo y de Justicia, en la ciudad de Colima, en contra de las reformas constitucionales que se están discutiendo en el Congreso de la Unión.
Es importante señalar que, a los pocos minutos de que empezaron a manifestarse a través de consignas que estuvieron coreando en todo momento, cayó un aguacero; sin embargo, ni una sola persona (incluido este reportero) se retiró ni dejó de brincar y gritar consignas, como aquella de “prefiero soportar la lluvia que soportar una dictadura”.
La manifestación de las y los trabajadores, que congregó a unas 200 personas, quizás un poco más, inició en apoyo a una comisión de funcionarios del Poder Judicial de la Federación que acudieron al Palacio de Justicia para entregar una invitación personalizada a todos los magistrados del Supremo Tribunal de Justicia del Estado, instándolos a apoyar las acciones de protesta que comenzaron hace más de una semana.
Mientras la comisión de trabajadores del Poder Judicial de la Federación se reunía con cada uno de los magistrados, en la explanada, decenas de mujeres y hombres que prestan sus servicios en el PJF coreaban a todo pulmón las consignas de protesta, al tiempo que mostraban cartulinas, ondeaban algunas banderas tricolores y exhibían lonas con leyendas de protesta.
Es relevante mencionar que algunas trabajadoras del Supremo Tribunal de Justicia del Estado, que observaban la manifestación desde dentro del Palacio Judicial, salieron a hacer señas de apoyo a la protesta, lo que provocó el agradecimiento de los empleados del Poder Judicial de la Federación.
Durante la protesta no faltó un seguidor del Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, que, desde la base donde se encuentra colocada la “Flama de la Justicia”, empezó a gritarles a las y los trabajadores, manifestándose en contra de su protesta. “¡Enséñense a perder!”, les gritó. Solo cambió su postura cuando los manifestantes comenzaron a corear vítores a México y al Poder Judicial de la Federación, lo que llevó a esa persona a unirse al coro de los manifestantes.
Asimismo, es de resaltar que, en cuanto llegaron las y los trabajadores a la explanada Plaza Bandera Nacional, la Secretaría General del Congreso del Estado ordenó cerrar con llave las puertas y accesos al para impedir que, en determinado momento, ingresaran las y los trabajadores a lo que los diputados de Morena dicen que “es la casa del pueblo”.
La sede legislativa se cerró con llaves y candados con la finalidad de garantizar la seguridad de las instalaciones y del personal, según comentaron al reportero los encargados de resguardar la seguridad del inmueble.
Las y los manifestantes soportaron toda la tormenta, sin que el ánimo menguara, y antes de concluir con su protesta, entonaron el himno nacional mexicano.