Wall Street cerró este martes en terreno mixto y el Dow Jones de Industriales, su principal indicador, bajó un 0.23%, hasta 40,736 puntos, con el mercado atento al debate de esta noche entre los candidatos a la Casa Blanca Kamala Harris y Donald Trump.
Tras el toque de campana, a diferencia del Dow Jones, el S&P 500 avanzó un 0.45%, hasta 5,495 unidades, y el tecnológico Nasdaq ganó un 0.84%, hasta 17,025 puntos.
Los inversores tienen los ojos puestos en el debate de esta noche entre Harris y Trump, que podría ser determinante para el mercado si los candidatos ofrecen nueva información sobre sus políticas económicas o si su desempeño cambia las expectativas sobre los resultados de los comicios.
Además, los operadores también esperan la publicación del índice de precios al consumo mañana y del índice de precios a la producción el jueves, 2 informes que podrían dar pistas sobre el rumbo que tomará la Reserva Federal (Fed) en cuanto a los tipos de interés.
En el plano corporativo, algunos de los grandes valores tecnológicos cerraban en verde: AMD subió un 3%, Microsoft un 2% y Nvidia un 1.5%, recuperándose así de las pérdidas de la semana pasada, cuando entre los inversores pesó el temor a una ralentización de la economía.
Más allá de las tecnológicas, el banco JPMorgan Chase cayó un 5% después de que su director de operaciones, Daniel Pinto, moderara sus previsiones de ingresos y gastos netos por intereses para 2025, al considerarlas demasiado optimistas.
Por sectores, predominaron las ganancias, encabezadas por el inmobiliario (1.77%) y el de bienes no esenciales (1.39%), mientras que las mayores pérdidas eran para el energético (-1.92%)y el financiero (-0.98%).
Entre los 30 valores del Dow, los mayores avances eran los de Microsoft (2.09%) y Home Depot (1.46%), y cerraban en rojo JPMorgan Chase (-5.19%) y Goldman Sachs (-4.39%).
En otros mercados, el rendimiento del bono del Tesoro a 10 años, de referencia, cayó hasta el 3.646 %, el oro subió a 2,545 dólares la onza, y el euro frente al dólar se cambiaba a 1.10.
Por su parte, el petróleo de Texas bajó un 4.31%, hasta los 65.75 dólares el barril, después de que la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) rebajara sus perspectivas de demanda.