El exmandatario del Hannover 96 MartinKind mantuvo una profunda discusión con 2 de los principales mandatarios del futbol alemán, Hans-Joachim Watzke (portavoz del comité de supervisión de la Bundesliga) y Andreas Rettig (director general de la Federación Alemana) por la llamada regla 50+1.
Kind, al que la Justicia recientemente negó en una sentencia su retorno al club del centro de Alemania, criticó a la Liga Alemana de Futbol (DFL) y a la Federación de Alemania de Futbol (DFB) durante una mesa redonda en Berlín y mantuvo un debate con ambos mandatarios por la normativa que rige la propiedad de los clubes germanos para que su mayoría accionarial esté en propiedad de los socios.
A esa normativa se la conoce popular e institucionalmente como “regla 50+1”.
“La DFL es un cártel, esa es mi convicción más profunda. Tiene estatutos que el Rettig mismo ha violado. No tenemos un mercado competitivo. Está totalmente distorsionado. En estas condiciones no tenemos ninguna posibilidad de acercarnos al Bayern”, arremetió Kind.
Rettig replicó con que “no hay mejor protección que 50+1”, ya que, detalló, está pensada para “empresas familiares en generaciones y no como gerentes asalariados que jadean de un período a otro” y puso de ejemplo que el “Leipzig es una historia de éxito”.
“Si revocamos la regla 50+1, acabaremos con una tabla de Forbes y no una tabla de deportes. La integridad de la competencia es crucial”, afirmó el responsable de la Bundesliga.
Kind también criticó el retroceso de la DFL en el modelo inversor y apuntó que “los responsables del futuro tendrán que explicarme cómo quieren implementar cualquier decisión” y que ya “dieron la señal” en las protestas de comienzos de año.
“Si la gente tiene suficientes agallas y son lo suficientemente ruidosos, ya no llevaremos a cabo ninguna reforma”, recriminó.
El exdirigente del Hannover recordó que principios de 2024, los aficionados provocaron repetidas interrupciones en los partidos lanzando pelotas de tenis al terreno de juego para expresar su descontento con la venta prevista por la DFL del 8% de los ingresos de la televisión durante 20 años al fondo de inversión CVC por alrededor de mil millones.
En respuesta a esto, el DFL cedió y detuvo las negociaciones con la entidad financiera ya que, en vista de las protestas masivas, muchos clubes temían una escalada de tensión de aficionados, incluidos ataques a los directivos del club.
“Eso es lo peor para mí y el señor Watzke realmente tiene que explicarlo. Ha causado un daño enorme al futbol alemán. Espero que las personas que supuestamente tienen cualidades empresariales y de liderazgo sepan lo que están haciendo. Tomar decisiones basadas en el populismo está fuera de mi alcance”, señaló Kind.
Rettig respondió con que “la idea de un inversor en la Bundesliga era buena y acertada”, pero “el problema fue que el uso de los fondos no se canalizó adecuadamente”; es decir, “recaudar dinero para invertir de forma sostenible”.