Sesenta organizaciones encabezadas por Racismo MX presentaron la “Agenda Nacional contra el racismo” que, con más de 20 propuestas para políticas públicas, pretende combatir el racismo que sufren las comunidades indígenas y afrodescendientes en México.
El acto se celebró en el Centro Pro Derechos Humanos de San Rafael, donde representantes de varias de las organizaciones implicadas en la redacción de la agenda presentaron un documento que aborda cinco aspectos fundamentales: visibilización, representación, nivelación y anti-discriminación.
“Las 20 políticas que se encuentran en la agenda son las más prioritarias de las organizaciones que trabajan en territorio (…) tenemos que incluir en la conversación políticas públicas que sirvan para contrarrestar el problema de raíz”, explicó el director de Racismo MX, José Aguilar, sobre los objetivos generales del documento.
La historiadora Fe Navarrete explicó la importancia del primero de los objetivos de la agenda por la necesidad de “visibilizar el racismo que existe en México” y de conocer la profundidad que este problema tiene en el país.
Para el director de cine y activista, André Lô Sánchez, es muy importante la inclusión de una visión antirracista en la educación.
“Consideramos que se debe hacer una revisión con perspectiva antirracista de los planes y programas de estudio de los libros de texto y de las herramientas metodológicas que tienen a su alcance docentes de educación básica y media básica”, señaló el director.
Otro aspecto a destacar de la agenda es la importancia que se concede a la mejora en aspectos de representación de personas pertenecientes a comunidades originarias o afromexicanas en cargos públicos, legislativos o ejecutivos, además de judiciales.
“Requerimos esta representación, pero también puestos de decisión, en espacios de toma de decisiones. Es decir, no solamente hablamos de poder judicial, sino también en el ejecutivo y legislativo, donde exista una diversidad de perspectivas”, señaló la activista de la Red Nacional de Abogadas Indígenas, Yuteita Valeria.
Valeria también hizo referencia a la falta de protección y apoyo que sufren las lenguas indígenas y las consecuencias que de esto se deslizan para la población que las tiene como lengua natal.
“Para las personas que hablan una lengua indígena ya sea porque son monolingüísticos o porque no existe un dominio completo del español, y peor aún de términos jurídicos y administrativos, no hay acceso a los trámites gubernamentales, por eso es importante reivindicar esta demanda”, denunció la abogada.
También hubo espacio para hablar sobre los problemas que sufren los migrantes racializados que discurren por México procedentes del cono sur o África, quienes, según explicó la internacionalista Dinorah Arceta, sufren revisiones con perfilamiento racial por parte de las autoridades.
“Esta práctica de revisiones migratorias se lleva a cabo bajo perfil racial, las personas están siendo interceptadas con base en su color de piel, como se expresan o en su olor incluso, por lo cual es una práctica migratoria contraria de los derechos humanos”, sentenció Arceta.