Isabel Martínez Pérez, directora de la Escuela Secundaria “Adalberto Torres Gaytán” en Tecomán, denunció “graves problemáticas” que, desde su punto de vista, enfrenta el plantel y su comunidad.
Ubicada en la colonia Bayardo de Tecomán, junto a las vías del tren y la carretera a Armería, dijo que la escuela ha lidiado durante 2 años con un preocupante deterioro en las condiciones de salud y seguridad de sus estudiantes.
La problemática más crítica, según Martínez Pérez, es la quema de basura y ramas por parte de algunos vecinos, una práctica que ocurre de manera cotidiana. “Desde que llegamos aquí, hemos enfrentado esta situación. Cada día, al llegar a las 6:30 de la mañana, nos encontramos con humo dentro de las aulas, lo que dificulta tanto la enseñanza como el aprendizaje de los niños”, señaló la directora.
Dijo que esa situación no solo afecta la salud de las y los estudiantes, sino que ha provocado un aumento en los casos de alergias y asma. Martínez Pérez comentó que ha intentado dialogar con los vecinos, pero la respuesta ha sido hostil. “Se comportan agresivos y groseros. Aunque saben que está mal quemar basura orgánica e inorgánica, no muestran disposición para cambiar”, lamentó.
Mencionó que la situación se agravó recientemente cuando se quemaron ramas y basura del Club Deportivo Caxitlán, que colinda con la parte trasera del plantel, lo que provocó una densa nube de humo que afectó a las y los alumnos y que, gracias a la intervención de los bomberos, pudo controlarse tras más de 3 horas.
La directora hizo un llamado a las autoridades locales: “Hemos solicitado la intervención de la Policía y otros organismos, pero no han atendido nuestras peticiones. La semana pasada, un incendio en un terreno cercano ardió durante horas antes de que alguien viniera a apagarlo”, denunció.
La falta de atención por parte de las autoridades, mencionó, ha generado un ambiente de desconfianza y desamparo. “Los padres de familia y los docentes estamos comprometidos en mejorar el bienestar de nuestros estudiantes, pero necesitamos el apoyo de la comunidad y de las autoridades. Es inaceptable que nuestros niños tengan que vivir con este riesgo para su salud”, enfatizó la directora.
Además, advirtió sobre el peligro que representa la alta maleza en el campo deportivo contiguo, ya que puede servir de escondite para personas malintencionadas, poniendo en riesgo a los estudiantes.
Cabe recordar que, con 25 años de antigüedad, la secundaria carece de techumbre en sus áreas deportivas, lo que impide que los estudiantes realicen actividades físicas al aire libre.
“La falta de una barda perimetral también es preocupante. Solo tenemos una malla ciclónica, lo que facilita el acceso no autorizado a la escuela”, añadió.
La directora también mencionó problemas con el suministro de agua: “Recientemente, nos quedamos sin agua en el aljibe, lo que complicó aún más la situación durante el incendio. Con aproximadamente 226 alumnos, necesitamos garantizar el acceso a agua tanto para higiene como para emergencias”, explicó.
Mencionó que, a pesar de los esfuerzos por mejorar la infraestructura escolar, como la reciente inversión en comedores y mejoras en los espacios, la escuela aún carece de lo esencial. “Hemos gestionado el cambio de impermeabilizante y la limpieza del terreno circundante, pero no hemos recibido respuesta de las autoridades correspondientes”, lamentó.
Martínez Pérez hizo un llamado urgente a las nuevas autoridades locales que asumirán el cargo próximamente: “Les invito a que visiten nuestra escuela, que conozcan el contexto y se involucren en la búsqueda de soluciones. Necesitamos su ayuda para sensibilizar a la comunidad sobre la importancia de no quemar basura y mejorar las condiciones de nuestra infraestructura”.
