Presente en el municipio de Tecomán, el líder estatal del PRI, Arnoldo Ochoa, admitió que su partido requiere y necesita una reconstrucción a fondo, pero ello se concretará tras las elecciones presidenciales de 2024, porque “entonces será el momento de hacerlo”.
Reunido con líderes e integrantes del Comité Directivo Municipal del PRI, explicó que los priistas han sido testigos de la historia y de cómo su partido político le dio estabilidad al país, pues, por ejemplo, se consolidó el desarrollo y la igualdad gracias al reparto agrario, sin olvidar los derechos de los trabajadores, para finalmente institucionalizar en México una nueva forma de hacer política con raíces revolucionarias, tomando en cuenta un Mundo en el que iniciaba un nuevo sistema económico. “Son 3 etapas históricas de México en las que el PRI fue factor primordial”, afirmó.
Actualmente, reconoció que el PRI representa los 18 millones de votos que obtuvo en la última elección, y aunque admitió que no son los que se lograban antes, tampoco es un porcentaje tan bajo como el de otros partidos que “han desaparecido por no lograr el mínimo del 3% (del total de votos). Somos un partido que se ha aliado para detener el autoritarismo y la destrucción de instituciones, obligado a cambiar”.
Ochoa González afirmó que el cambio del PRI ha sido detenido por muchas circunstancias: “Se detuvo en 1994 con el asesinato de Luis Donaldo Colosio y no pudimos hacer el cambio en el 2000 después de perder las elecciones presidenciales, así que el cambio sigue pendiente”.
El líder estatal del PRI concluyó su intervención señalando que para que el partido siga vigente, se requiere de un cambio profundo y mantener la unidad como su “característica básica”, para así actualizar el partido para el siglo 21, ya que “así lo demanda la militancia y la sociedad”.