Los Boston Celtics, con 27 puntos de Jaylen Brown y 25 de Jayson Tatum, arroyaron 102-122 a unos Washington Wizards en pleno proceso de reconstrucción que salieron con sus 2 rookies en el quinteto inicial.
Los Celtics (2-0) resolvieron el partido de Washington igual que contra los New York Knics: asustando.
Tatum fue el más completo de Boston, con su segundo doble-doble de la temporada con 25 puntos y 11 rebotes, además de 6 asistencias. Brown, por su parte, fue el máximo anotador firmando 27 puntos, 8 rebotes y 4 robos.
Para los Wizards era su debut esta temporada tras firmar la peor campaña de su historia el año pasado, con un balance de 15-67.
Seguramente los Celtics no eran el rival más fácil para el debut de un equipo en reconstrucción, con los rookies Alexandre Sarr (número 2 del draft) y Carlton Carrington (número 14) acompañando a Jordan Poole, Kyle Kuzma y Bilal Coulibaly de inicio.
Poole fue el mejor de los Wizards, con 26 puntos. También destacó para los de Washington una de las incorporaciones del verano, el lituano Jonas Valanciunas con 18 puntos.
Los rookies tuvieron un debut más bien discreto: Sarr hizo 2 puntos, 5 rebotes y 2 tapones en casi 22 minutos, mientras que Carrington sumó 3 puntos, 3 rebotes y otros 2 tapones en 26 minutos.
Los Washington Wizards eran sobre el papel un rival fácil para el vigente campeón, pero también algo impredecible con el quinteto inicial de Brian Keefe, con Alexandre Sarr y Carlton Carrington sobre el parqué.
Lo cierto es que los Wizards sorprendieron de inicio, sobre todo gracias al acierto desde la línea de 3 de Jordan Poole. El escolta firmó 17 puntos en los 12 minutos iniciales, con un 6 de 8 en triples. Un espejismo de lo que sería el partido.
Los de Washington llegaron a ponerse con un +8 en el ecuador del cuarto, pero los Boston Celtics, con el mismo quinteto que ganó el anillo hace 4 meses a los Dallas Mavericks, no dejaron que la cosa fuera a más y se aseguraron una mínima ventaja al primer toque de bocina (32-33).
La resistencia capitalina duró lo que duró. Tras guerrear en los primeros minutos del segundo cuarto, el duelo pasó a ser un trámite para los Celtics.
Dos triples de Jayson Tatum, que ya llevaba 14 puntos del primer cuarto, dieron a los Celtics un colchón que ya no soltarían. El resultado al descanso era un cómodo 54-64.
Los Celtics dedicaron el tercer cuarto a finiquitar el partido. Sin los puntos de Poole, al que se le enfrió la muñeca tras el sorprendente primer cuarto, la ventaja visitante fue creciendo ataque tras ataque.
Solo el lituano Jonas Valanciunas sostuvo a los Wizards en este punto del partido.
Tres triples seguidos de Payton Pritchard catapultaron a los Celtics hasta el +25 que reflejaba el luminoso al final del cuarto (73-98).
Jaylen Brown arrancó el cuarto con 2 triples seguidos que con apenas 41 segundos disputados ameritaron un tiempo muerto de los Wizards.
Los Celtics alcanzaron una máxima diferencia de +32, momento en el que Joe Mazzula optó por hacer pruebas con todos los titulares sentados, un periodo que los Wizards aprovecharon para maquillar el resultado final al 102-122.
