A escasas horas de que Rúben Amorim llegue al Manchester United, Ruud Van Nistelrooy ha creado la duda de si era necesario el fichaje del portugués. Cuatro partidos con Ruud, un empate y 3 victorias, la última ante el Leicester City (3-0) y avistar a 15 puntos la Champions League.
Es cierto que el calendario ha sido benévolo con el holandés y ha derrotado en esta interinidad al Leicester City en 2 ocasiones, al PAOK y empatado con el rival más difícil, el Chelsea, pero Van Nistelrooy ha corregido el rumbo tétrico de Erik Ten Hag y aumentado sus posibilidades de quedarse en el cuerpo técnico de Amorim o de irse a otro equipo como técnico principal.
Jugadores como Bruno Fernandes, que estaba desparecido esta temporada con Ten Hag al mando, han despertado bajo el abrigo de Van Nistelrooy, y es que el capitán fue la figura del duelo ante el Leicester.
Con un disparo al palo largo abrió la cuenta goleadora, sumando su cuarto tanto en 4 duelos. Desde que se fue Ten Hag, Fernandes le ha hecho dos tantos al Leicester en Copa de la Liga, uno al Chelsea y contra el PAOK, en Europa League, repartió una asistencia. Números de crack que podrían haber sido incluso mejores si la Premier no hubiera entendido que su segundo gol de este domingo fue en realidad en propia puerta.
Mazraoui puso un gran centro al corazón del área y Fernandes cruzó para rematar con el muslo. La pelota tocó en Victor Kristiansen y despistó a Hermansen.
El portugués iba corriendo al córner a celebrarlo mientras se señalaba la pierna, pero la Premier decidió que la intervención del danés fue suficiente para considerar el tanto en propia puerta y evitó el doblete del capitán.
Su trabajo ya estaba hecho y la victoria del United encarrilada. Van Nistelrooy se irá este lunes con un registro que ha hecho olvidar rápidamente a Ten Hag y que Amorim tendrá que continuar si no quiere que la afición empiece a preguntarse si no hubiera sido mejor idea dejar en el banquillo a su leyenda.
Para redondear la tarde, Alejandro Garnacho, que entró desde el banquillo anotó uno de sus goles favoritos. Recibió en perfil derecho y definió a la escuadra contraria con la diestra. La asistencia, además, se la llevó Fernandes.
Clasificado para los cuartos de la Copa de la Liga, con 4 puntos de 6 en Premier League y el primer triunfo europeo ante el PAOK, Van Nistelrooy deja también un balance de 11 goles a favor (más de 2.5 por partido) y tres en contra.
Eso sí, falta mucho para que los “Diablos Rojos” remonten el vuelo. En estos momentos y pese a este empuje son decimoterceros con 15 unidades, a 4 de los puestos de Champions League.
El Leicester se mantiene decimoquinto, con un colchón de 5 puntos sobre el descenso.