El Manchester City de Pep Guardiola dejó escapar una ventaja de 3-0 contra el Feyenoord, lo que resultó en una remontada en el Etihad Stadium.
Un partido que, a pesar de dominar con claridad hasta el minuto 75, terminó en un empate 3-3 que ha dejado al equipo de Guardiola sumido en una nueva crisis de resultados.
Erling Haaland, con un doblete (uno de penalti y otro tras un pase de Matheus Nunes), e Ilkay Gündogan, quien anotó con la colaboración de un desvío, parecían haber asegurado la victoria del City en la segunda mitad. Pero un error defensivo de Josko Gvardiol, que entregó el balón a Anis Hadj Moussa para el 3-1, abrió la puerta a una remontada sorpresiva.
El City, con una ventaja de 2 goles, parecía tener controlado el encuentro, pero otro error defensivo en el minuto 82 permitió a Santiago Giménez marcar el 3-2. La defensa, de nuevo desorganizada, cedió el espacio necesario para que el Feyenoord, con todo en contra, se acercara a la igualada.
En el minuto 90, en un centro de Igor Paixao, David Hancko aprovechó la salida errónea de Ederson para marcar el gol del empate, dejando al Manchester City completamente desconcertado y sin respuestas. Jack Grealish tuvo la oportunidad de evitar la caída del equipo con un remate al larguero en los últimos instantes, pero la suerte no estuvo de su lado.
Este empate deja al City sumido en una mala racha de 6 partidos sin victorias, con solo 8 puntos en la clasificación de la Champions y la Premier League en peligro. La crisis parece agudizarse para el equipo de Guardiola, que ahora se enfrenta a un futuro incierto con 3 partidos cruciales por delante.