Estados Unidos hizo públicos 2 informes presidenciales sobre el golpe de Estado de Augusto Pinochet del 11 de septiembre de 1973 en Chile.
En el primero, fechado el 8 de septiembre de ese año, los asesores del entonces presidente estadounidense, Richard Nixon (1969-1974), avisan sobre un “posible intento de golpe” en el país latinoamericano, mientras que en el segundo, del 11 de septiembre, informan de que varias “unidades militares clave” apoyan la intentona.
En un comunicado, el Departamento de Estado estadounidense aseguró que la desclasificación de este viernes (25) demuestra su “compromiso continuo” con la relación entre EUA y Chile.
Los informes presidenciales son documentos que elaboran los servicios de inteligencia cada día para informar al mandatario estadounidense de la actualidad internacional y son estrictamente confidenciales.
En 2016, el entonces presidente de EUA, Barack Obama (2009-2017), ordenó la desclasificación de documentos relacionados con diferentes episodios de la historia latinoamericana, como el atentado en 1976 contra el político chileno Orlando Letelier en Washington, o la “guerra sucia” de la última dictadura argentina (1976-1983).
En el informe presidencial del 8 de septiembre desclasificado este viernes (25), los asesores de Nixon detallan que el entonces presidente de Chile, Salvador Allende, considera que sus seguidores no tienen armas suficientes para enfrentarse al Ejército y que la única solución posible es política.
Allende “está preocupado por las presiones de la oposición y, en especial, por las intenciones del Ejército”.
El 11 de septiembre, el día del golpe, los servicios de inteligencia estadounidenses avisaron del apoyo de sectores clave del Ejército a la intentona, pero advirtieron de que los militares podrían no tener “un plan efectivo y coordinado para aprovechar la extendida oposición civil” al Gobierno chileno.
Mientras, “el presidente Allende, por su parte, todavía tiene esperanzas de que postergar una decisión evite el conflicto”, se lee en el documento.
En la tarde de ese día, el presidente socialista se suicidó, dando comienzo a la dictadura de Pinochet, que duró 17 años y dejó más de 3 mil oponentes políticos muertos o desaparecidos.
Pese a que no hay pruebas de una implicación directa de Nixon en el golpe, miles de documentos que se han ido desclasificando desde el mandato de Bill Clinton (1993-2001) han demostrado la profunda hostilidad de Nixon y de su mano derecha Henry Kissinger hacia Allende desde antes que asumiera el cargo, además de que la CIA apoyó y financió a grupos para desestabilizar al Ejecutivo.
La desclasificación de documentos estadounidenses sobre la dictadura en Chile es una demanda histórica del país latinoamericano.