El serbio Vanja Milinkovic-Savic, portero del Torino quien le paró un penalti al ítalo-argentino Mateo Retegui para conseguir el empate ante el Atalanta (1-1), denunció que la afición del equipo de Bérgamo le profirió insultos racistas, llamándole “gitano” y “serbio de mierda”.
“Los insultos los soporto, es futbol, pero no los racistas, esas cosas no están bien”, dijo el meta a DAZN tras el encuentro.
“Me llamaron gitano y serbio de mierda. Me molestan estas cosas. No respondí, pero esto no deberían ocurrir en un campo de futbol”, añadió.
Además, al portero, hermano mayor de Sergej Milinkovic-Savic, ex del Lazio y actual jugador del Al Hilal saudí, le lanzaron varios objetos, entre ellos un encendedor. “El lanzamiento de objetos tampoco forma parte del deporte”, sentenció.
Es el tercer penalti que para el guardameta en lo que va de temporada. El empate del Toro lo anotó el chileno Guillermo Maripán, con un testarazo que supuso su primer tanto en la Serie A.