Por Rogelio Camarillo Carrillo
A Gabriel Martínez Campos
El reciente discurso de Paco Ignacio Taibo, director general del Fondo de Cultura Económica, en el marco del lanzamiento del proyecto 25×25, ha generado un gran entusiasmo renovado en el ámbito de la lectura en México, y particularmente en Colima. Este ambicioso proyecto tiene como objetivo distribuir 2 millones y medio de libros en varios países de América Latina, incluyendo México, y busca fomentar la lectura entre jóvenes y adolescentes. En este artículo, exploraremos los beneficios de esta iniciativa en el contexto del Programa Nacional de Salas de Lectura, que celebra 30 años de existencia, y subrayaremos la importancia de fortalecer el fomento a la lectura en el estado.
El Proyecto 25×25: Un Gran Alcance
El 25×25 no solo se presenta como un programa de distribución de libros, sino como una estrategia integral para despertar el interés por la lectura. Según Taibo, el objetivo es “hacer que jóvenes y adolescentes lean por placer” (Taibo, 2025). Esta iniciativa es crucial en un país donde el hábito de la lectura ha sido históricamente bajo. La inclusión de obras de autores reconocidos, como Gabriel García Márquez y Mario Benedetti, junto con voces emergentes, asegura una oferta variada que puede atraer a diversos públicos. Como señala Cruz (2012), “La lectura no solo enriquece el conocimiento individual, sino que también promueve la cohesión social y el desarrollo comunitario”.
Beneficios para el Fomento a la Lectura en Colima
Colima se ha consolidado como un importante referente nacional en el fomento de la lectura gracias al Programa Nacional de Salas de Lectura de la Subsecretaria de Cultura. Este programa ha llevado la lectura a comunidades remotas, albergues, asilos, escuelas, hospitales y centros penitenciarios, siendo fundamental en la formación de mediadores de lectura. Con el apoyo de la UAM Xochimilco y la Secretaría de Cultura, se ha creado un diplomado para mediadores que ha aumentado significativamente el número de voluntarios en el estado.
1. Acceso a la lectura: El 25×25 complementará los esfuerzos del programa al proporcionar una mayor cantidad de libros a comunidades que ya están familiarizadas con la lectura a través de mediadores.
2. Fortalecimiento de redes: La colaboración con editoriales y gobiernos estatales permitirá una sinergia que potenciará el impacto del programa en todo el estado.
3. Cambio de mentalidad: La lectura tiene el poder de transformar la mentalidad de las personas y comunidades. Al fomentar el placer de leer, se contribuye al desarrollo personal y social.
Ley Estatal para el Fomento a la Lectura y al Libro
En Colima, la Ley Estatal para el Fomento a la Lectura y al Libro, publicada en septiembre de 2006, tiene como objetivo organizar los esfuerzos del gobierno estatal para fomentar la lectura entre los colimenses. Esta ley busca dotar al gobierno de los instrumentos necesarios para aprovechar políticas federales en la materia y alentar la participación de los gobiernos municipales. Además, se establece el fomento a la lectura y el libro en el marco de la libertad de escribir, editar y publicar, buscando que la lectura y el libro sean accesibles a toda la población (Gobierno del Estado de Colima, 2006).
El rol de los mediadores de lectura
El trabajo de los mediadores de lectura, coordinados por el decano del PNSL , reconocido enlace estatal y activista Gabriel Martínez Campos y el equipo estatal, ha sido fundamental en la implementación del Programa Nacional de Salas de Lectura. Estos voluntarios han dedicado años a llevar la lectura a cada rincón del estado desde sus espacios y más, y su labor es ejemplar digno de destacar por la mística y pasión que le imprimen a su labor. Sin embargo, para maximizar el impacto del 25×25, es esencial que se asignen más recursos para talleristas que recorran todas las comunidades y colonias en Colima, y la creación de un fondo de recursos permitiría realizar actividades más amplias y efectivas como la ludoteca, la bebeteca, la cafebreria y el teatrino. Sin omitir el aire acondicionado del Centro de Cultura Escrita Miguel Ángel Cuervo, que es ya prioritario.
Necesidad de Recursos
Para que el programa alcance su máximo potencial, se requiere una inversión significativa. La creación de un fondo de recursos permitirá que los encargados del programa puedan realizar actividades más amplias y efectivas. La experiencia acumulada en el campo demuestra que la inversión en cultura y educación es fundamental para el desarrollo social.
Conclusión
El discurso de Paco Ignacio Taibo sobre el 25×25 representa una oportunidad única para el fomento de la lectura en México y, en particular, en Colima. La colaboración entre diferentes sectores y el apoyo a mediadores de lectura son esenciales para llevar este proyecto a su máxima expresión. Al celebrar 30 años del Programa Nacional de Salas de Lectura, es momento de multiplicar esfuerzos y asegurar que la lectura llegue a todos los rincones del estado, transformando vidas y comunidades.
Referencias
Cruz, J. (2012). La lectura como herramienta de desarrollo social. Revista Mexicana de Comunicación, 10(1), 15-30.
– Gobierno del Estado de Colima. (2006). Ley Estatal para el Fomento a la Lectura y al Libro. Recuperado de [https://congresocol.gob.mx/web/Sistema/uploads/LegislacionEstatal/LeyesEstatales/fomento_libro.pdf](https://congresocol.gob.mx/web/Sistema/uploads/LegislacionEstatal/LeyesEstatales/fomento_libro.pdf)
– Taibo, P. I. (2025). Discurso sobre el proyecto 25×25. Fondo de Cultura Económica.
– López, A. (2022). Fomento a la lectura en México: Retos y perspectivas. Análisis Cultural, 8(1), 23-39.
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