Las autoridades de Canadá ordenaron la evacuación de centenares de habitantes de comunidades indígenas remotas en el noroeste del país, sumándose a más de 21,000 personas desplazadas por decenas de incendios forestales que permanecen fuera de control.
La situación más crítica se presenta en el noroeste de Manitoba, donde unas 17,000 personas ya abandonaron sus viviendas. Entre ellas se encuentran los 5,000 habitantes de Flin Flon, localidad minera que fue desalojada ante el avance de un incendio que ha consumido 38,000 hectáreas de bosque.
Este sábado, también se evacuó a los 600 residentes de Cranberry Portage, tras quedar sin electricidad por otro incendio en las cercanías. Además, a unos 100 kilómetros al norte, helicópteros Chinook de las fuerzas armadas canadienses están trasladando a integrantes de la comunidad indígena Mathias Colomb Cree Nation, cuya evacuación se inició el miércoles y continuará el domingo, debido a un incendio que ha arrasado 9,785 hectáreas.
El Ministerio de Medio Ambiente de Canadá advirtió que el humo generado por los incendios ha deteriorado la calidad del aire a niveles peligrosos, por lo que se recomienda a la población permanecer en interiores el mayor tiempo posible.
Según datos oficiales, actualmente hay 179 incendios activos en el país, de los cuales 101 están fuera de control, con mayor concentración en el oeste, impulsados por altas temperaturas y baja humedad. Las provincias más afectadas son Columbia Británica con 62 incendios, Alberta con 50, Saskatchewan con 13, Manitoba con 15 y Ontario con 17. Tanto Manitoba como Saskatchewan han declarado el estado de emergencia provincial.

