Segunda de 2 partes
Allende. A 50 años del golpe militar en Chile, que depuso al presidente Salvador Allende, el presidente Andrés Manuel López Obrador viajó a ese país austral y le rindió homenaje al gran estadista Allende. “Fue abominable la traición de Pinochet” dijo el presidente López Obrador en Santiago de Chile, en el homenaje a Salvador Allende, “un hombre humanista que dio lecciones de democracia”. En su turno, el presidente de Chile, Gabriel Boric recordó emocionado la figura valiente de Gonzalo Martínez Corbalá, el entonces embajador de México en Chile, que afrontando riesgos personales salvó a cientos de chilenos de la dictadura, dándoles asilo en la embajada mexicana y trasladándolos a México para salvarles la vida, por instrucciones del entonces presidente Luis Echeverría Álvarez, quien de inmediato dispuso todo el apoyo de México para salvar a los ciudadanos de ese país que corrían peligro por la dictadura militar que se impuso a sangre y fuego. A 50 años de ese aciago momento, el golpe militar, hubo severas protestas en las calles de Santiago de Chile, que fueron dispersadas por las tanquetas que arrojan potentes chorros de agua. Las tanquetas son emblema de la dictadura militar de Pinochet. El hecho de que un gobierno democrático y de izquierda como el de Gabriel Boric, recurra a las tanquetas de agua y a la policía de carabineros, no deja de ser una cruel paradoja y es, nos guste o no, “una victoria cultural de Pinochet”. Nada más, pero tampoco nada menos. En los años de la dictadura militar hubo más de 40 mil muertos y miles de desaparecidos. Se impuso el modelo económico neoliberal con la fuerza de los tanques y las bayonetas, hasta que la sociedad expulsó del poder al dictador con el plebiscito del NO en 1989. Un año después, Pinochet tuvo que dejar el poder a los civiles en 1990. Y ahora, gobierna la izquierda, si bien acotada por la fuerza de la ultraderecha y el pinochetismo que sigue vigente en las clases altas chilenas y en el ejército. Colibecas. Uno de los programas más emblemáticos de la gobernadora Indira Vizcaíno es Colibecas, un programa muy noble, orientado a fortalecer la educación, con un enfoque igualador y de justicia social, que pone al alcance de los niños y jóvenes, computadoras, mochilas y útiles escolares. En el Complejo Administrativo se ha hecho entrega de estos materiales por parte de los gobiernos estatal y federal. Este proyecto educativo es congruente con el espíritu del artículo tercero de la Carta Magna que postula que la educación es un instrumento legítimo de movilidad social y un camino para la democracia. Literalmente, la escuela es un instrumento para la formación educativa, pero también es escuela para la democracia. El choque. En este momento, en la batalla por la Presidencia de la República, Morena luce más fuerte con la fuerza inercial que le confiere detentar el poder presidencial y 23 de las 32 gubernaturas. Claudia Sheinbaum es buena candidata, está preparada y tiene todo el apoyo del presidente AMLO que tiene altos niveles de popularidad. Todo esto le favorece. Sin embargo, enfrente tienen a Xóchitl Gálvez que tiene la fuerza y movilización potencial de la sociedad civil, una fuerza que fue superior a los partidos que la postulan como lo demostró al desplazar a Santiago Creel y a Beatriz Paredes, lo cual no es un dato menor. Si Morena consolida su presencia y su fuerza electoral de cara a los comicios del 2024 es muy posible que se imponga y retenga la Presidencia de la República en el 2024. Sin embargo, si Xóchitl logra crecer con la fuerza de la sociedad civil y de los partidos que la postulan, la elección se puede cerrar y tendremos un choque de trenes con resultados inciertos. Es la incertidumbre inherente a la democracia, en la cual no se puede saber el resultado final, pues se ignora como va a reaccionar el pueblo, los votantes que serán el fiel de la balanza. Esto es lo que se ve hasta el momento. El choque colosal entre 2 fuerzas. El otro escenario, es si Marcelo Ebrard se postula y logra crecer hasta ser una fuerza competitiva que ponga en riesgo el resultado final. Esto es lo que se visualiza hasta este momento. Las mujeres. En cualquier escenario, es el tiempo de las mujeres. Por primera vez en la historia de México, una mujer puede ser presidenta de la República y eso va a cambiar las relaciones sociales, la disputa por el poder y muchas cosas en el país. Asistimos a tiempos nuevos. El patriarcado empieza a llegar a su fin y la equidad de género es una posibilidad real en todas las dimensiones de la agenda nacional. Viene una nueva edad para México.
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