Siete familias de la comunidad de La Salada, en el municipio de Tecomán, denuncian presiones para abandonar sus viviendas como parte de un proyecto de ampliación de la autopista. La preocupación y el enojo crecen entre los habitantes, quienes aseguran que no han sido consultados ni informados de manera clara sobre los alcances de la obra.
Nayeli Mendoza Franco, comisaria suplente de la comunidad, señaló que la empresa encargada del proyecto inició mediciones sin previo aviso formal. “Cuando preguntamos si nuestras viviendas serían afectadas, nos dijeron que no. Desde antes se sabía de la ampliación, pero nunca vinieron a hablar con la comunidad. Ahora resulta que sí van a afectar 7 casas”, denunció.
Aunque Mendoza aclaró que no se oponen al desarrollo de infraestructura, enfatizó que no debe construirse a costa de sus hogares ni sin respetar sus derechos. Según la comisaria, las viviendas cuentan con escrituras y títulos de propiedad, y sus habitantes no aceptarán una reubicación forzada. “Nosotros no estamos vendiendo nuestras casas. Nos quieren mover sin llegar a un acuerdo ni escuchar a la comunidad”, afirmó.
Los habitantes también han manifestado su inconformidad con la opacidad del proceso. Mendoza Franco destacó que no se ha informado oficialmente qué empresa es responsable del proyecto ni quién está tomando decisiones en el terreno. “Solo ha venido un ingeniero a hablar, pero no sabemos de qué empresa se trata”, explicó, subrayando que la comunidad se siente ignorada deliberadamente.
La comisaria añadió que ya han buscado asesoría legal para defender su derecho a la propiedad. Para este jueves 12 de junio se espera la visita de representantes del proyecto, quienes pretenden continuar con las mediciones. Sin embargo, los vecinos han advertido que no permitirán el ingreso mientras no haya un acuerdo justo. “No pueden venir a desalojarnos diciendo que el proyecto ya está hecho y no se puede cambiar. Nunca nos consultaron antes”, concluyó Mendoza.

