En el marco de las Jornadas Académicas 2025 de la Universidad de Colima (UdeC), la conferencia “Desarrollo Sostenible en Ciudades Inteligentes” ofreció una mirada profunda al futuro de nuestras urbes.
Con la participación de destacados expertos como Marco Martínez O’Daly y Elizabeth Maigler Kluesserath, la discusión no solo abordó la urgente necesidad de transformar los entornos urbanos, sino también el papel central que la educación superior debe asumir en esta tarea.
El diagnóstico planteado por los ponentes no es alentador: nuestras ciudades enfrentan una triple crisis de urbanización desordenada, infraestructura obsoleta y modelos económicos anclados en el pasado. Esa situación se agrava en contextos donde más de la mitad de la población urbana vive en condiciones de irregularidad, sin acceso a servicios básicos ni seguridad jurídica. Es un panorama que requiere, como señaló Martínez, “cambiar el chip” y adoptar un enfoque disruptivo que permita repensar cómo planificamos y vivimos en nuestras ciudades.
Pero no se trata solo de identificar problemas; también es imprescindible construir soluciones. Martínez propuso estrategias que van desde la digitalización de trámites administrativos y la reconversión de servicios públicos hacia modelos autosustentables, hasta la creación de espacios urbanos que promuevan identidad y calidad de vida. Esos ejemplos, inspirados en modelos exitosos de Estonia y Medellín (Colombia), nos recuerdan que las ciudades no solo son espacios físicos, sino también comunidades humanas que requieren amor, arte y una visión integral para florecer.
El mensaje de Maigler también fue contundente: sin educación y formación técnica adecuada, el cambio no es posible. La profesionalización de equipos técnicos y tomadores de decisiones es clave para garantizar una gestión urbana más eficiente y menos discrecional. A través de la Red de Ciudades Inteligentes, la Fundación “Friedrich Naumann” ha demostrado que la combinación de capacitación, participación ciudadana y voluntad política puede generar transformaciones significativas en diversas regiones de México y Latinoamérica.
En ese contexto, la Universidad de Colima tiene un rol insustituible. Como espacio de formación y reflexión, debe preparar a los líderes y planificadores del mañana, aquellos que enfrentarán los retos de construir ciudades más interconectadas, sustentables y humanas. Las y los estudiantes que hoy se forman en nuestras aulas serán los responsables de aplicar estos modelos innovadores, no solo para garantizar un desarrollo urbano más eficiente, sino también para construir comunidades más inclusivas y con una mayor calidad de vida.

