Aficionados de Universidad de Chile se manifestaron frente a la embajada de Argentina en Santiago para denunciar los maltratos sufridos por aficionados que acompañaron al equipo en el partido suspendido de Octavos de Final de la Copa Sudamericana.
El encuentro de vuelta, que definía al clasificado a Cuartos, fue suspendido en el minuto 48 con un marcador de 1-1 en el Estadio Libertadores de América de Avellaneda, luego de que los enfrentamientos en las gradas dejaran 22 heridos y 111 detenidos, 109 de ellos chilenos.
La barra oficial del club, Los de Abajo, convocó la protesta a través de redes sociales. Los asistentes portaron carteles que exigían la libertad de los aficionados y denunciaban la “crueldad” de los arrestos, mientras un amplio operativo policial resguardaba la embajada e impedía cortes de tránsito.
El ministro del Interior chileno, Álvaro Elizalde, viajó a Buenos Aires para supervisar la situación y se reunió con la ministra de Seguridad argentina, Patricia Bullrich. Elizalde aseguró que acompañará a los heridos y supervisará el trato a los detenidos, mientras Bullrich indicó que las investigaciones identificarán a los responsables sin distinción de nacionalidad o equipo.

