Formación en accesibilidad digital: contribución y trabajo pendiente*
Por Silvia B. Fajardo Flores**
Las tecnologías de información y comunicación son cada vez más imprescindibles en nuestra vida diaria: sea con fines educativos, laborales o de entretenimiento, recurrimos a dispositivos y aplicaciones para acceder a contenidos diversos. El acceso a la información es un derecho humano; sin embargo, existen barreras para personas con alguna discapacidad, aunque cuenten con los requerimientos técnicos y las habilidades para acceder a la información. Esto se debe a que la accesibilidad de contenidos es responsabilidad de quien los elabora.
Existen guías de accesibilidad internacionales (WCAG, por sus siglas en inglés) que están disponibles de manera pública desde su primera versión, en 1998, hasta la más reciente, de 2023. Sin embargo, tales guías no son del conocimiento general en la comunidad de creadores digitales, diseñadores y desarrolladores de software. En un estudio realizado por WebAIM —de 2019 a 2024— en el millón de páginas web más importantes a nivel mundial, se encontró que el 95.90% de las páginas de inicio tenía errores, precisamente, de accesibilidad. El 96.40% de los errores detectados se sitúan dentro de las siguientes categorías: contraste insuficiente, texto alternativo faltante, etiquetas de formulario faltantes, enlaces vacíos, botones vacíos, lenguaje no especificado. Tales errores, si bien afectan en menor medida al público en general, dificultan y, en algunos casos, imposibilitan el acceso a la información a personas con discapacidad visual; en específico, a personas ciegas que utilizan un lector de pantallas para percibir de manera auditiva los contenidos.
En un estudio realizado en páginas de inicio de 18 universidades mexicanas —que incluye a la Universidad de Colima— se encontró que tienen una accesibilidad entre 54% y 95%; y los tipos de errores más frecuentes son los mismos que señala el estudio de WebAIM. Seis de las páginas universitarias recurren a un servicio de panel de accesibilidad, una solución rápida (con IA), que poco abona a la accesibilidad real.
Los contenidos en video también requieren consideraciones para ser accesibles a personas con dificultades perceptuales. Un estudio de accesibilidad —en 2020 y 2021— en 175 universidades de 15 países de Europa, encontró que el 75% de las lecciones en video eran inaccesibles a personas con discapacidad auditiva. Aún después de la pandemia, en la que las instituciones educativas se vieron forzadas a trasladarse al formato digital, en 2024, sigue habiendo videos educativos sin subtítulos, o con subtítulos incorrectos, y sin audio descriptivo.
Si bien a todos nos corresponde contribuir a la accesibilidad, las personas que trabajamos en la formación de estudiantes de las áreas de computación y tecnologías de la información tenemos la responsabilidad de incluir este tema como parte de los conocimientos y habilidades básicas del estudiantado.
A partir de los programas de Ingeniería de Software (plan K802) e Ingeniería en Tecnologías de Internet (plan K803), vigentes desde 2017, se incluyen de manera gradual temas de accesibilidad en las materias: Interacción humano-computadora, Diseño y evaluación de interfaces de usuario, y la optativa Accesibilidad de contenidos. Entre los temas principales se encuentran: diversidad de personas con discapacidad y sus necesidades, tecnologías asistivas, estándares internacionales de accesibilidad (WCAG, WCAG2ICT) y su aplicación, así como herramientas para el desarrollo y la evaluación de contenidos accesibles. La enseñanza se rige por los principios de diseño centrado en el usuario; es decir, centrados en las personas con discapacidad, no en la tecnología, para garantizar la pertinencia. Además, se incluye la participación de personas con discapacidad en actividades escolares diversas, para que el estudiantado comprenda y valore el impacto de una buena accesibilidad.
En el periodo 2020-2024, 77 estudiantes de la Ingeniería de Software han cursado la materia optativa Accesibilidad de contenidos; en la que, además de producir documentos y videos accesibles, elaboran páginas web interactivas que cubren los requerimientos técnicos de accesibilidad WCAG 2.2; y que, además, son evaluadas y retroalimentadas por personas con alguna discapacidad.
La tarea pendiente de formación en accesibilidad de contenidos radica en la educación continua. Si bien los principios y guías de accesibilidad no son recientes, se requiere una mayor difusión de estos para que las personas que desarrollan aplicaciones, páginas web y otros contenidos digitales elaboren productos que sean de fácil acceso para todas las personas.
Fragmento de la conferencia magistral “Accesibilidad digital. Perspectiva de integración en el currículum” (https://www.facebook.com/ENIIESMexico/videos/900231192080088/), presentada en el 1er. Encuentro Internacional y 3er. Encuentro Nacional de Instituciones Inclusivas de Educación Superior (ENIIES). La inclusión educativa en las instituciones de educación superior: avances y desafíos.
**Profesora-Investigadora de la Universidad de Colima, adscrita a la Facultad de Telemática y profesora de la Maestría en Tecnologías de Internet.
Las opiniones expresadas en este texto periodístico de opinión, son responsabilidad exclusiva del autor y no son atribuibles a El Comentario.
