El jefe de Red Bull, Laurent Mekies, y el CEO de Ford, Jim Farley, destacaron la importancia de Max Verstappen en el desarrollo de la nueva unidad de potencia que ambas marcas preparan para la temporada 2026 de la Fórmula 1.
Red Bull Powertrains trabaja en conjunto con Ford para fabricar desde cero el motor que usarán Red Bull Racing y Racing Bulls, tras la salida de Honda rumbo a Aston Martin. Mekies calificó el reto como “el tipo de cosas locas que hace Red Bull”, comparándolo con “escalar el Monte Everest”.
Farley señaló que Verstappen es “uno de los pilares más importantes para el éxito” del proyecto, al aportar estabilidad dentro y fuera de la pista. Mekies agregó que el neerlandés “no solo pide cifras, también colabora en simuladores, con ingenieros y en la definición de potencia y carga aerodinámica”.
Ambos directivos coincidieron en que el 4 veces campeón mundial juega un papel decisivo en la transición hacia las nuevas regulaciones, al involucrarse de manera directa en el diseño del coche que Red Bull espera poner en pista a partir de 2026.
Con información de F1.com

