Estados Unidos detendrá algunos programas de asistencia a Gabón tras el golpe de Estado que sufrió el país africano a finales de agosto, anunció este martes el Departamento de Estado en un comunicado.
La medida estará en vigor mientras Washington evalúa “la intervención inconstitucional de los miembros del Ejército del país”, dijo en el escrito el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken.
La oficina no especificó qué programas se verán afectados, pero matizó que se trata de ayudas al Gobierno gabonés, y que seguirá ofreciendo servicios consulares en el país.
Tras el golpe, la Unión Africana suspendió a Gabón como miembro, y múltiples organismos y gobiernos de todo el mundo condenaron la intentona.
Sin embargo, el primer ministro instaurado por los golpistas, Raymond Ndong Sima, pudo participar la semana pasada en la apertura del 78 período de sesiones de la Asamblea General de la ONU en representación de su Gobierno.
Ndong Sima aprovechó la tribuna para reivindicar el golpe que, en su opinión, sirvió para interrumpir unas elecciones que calificó de “fraudulentas”, en consonancia con un buen número de observadores.