Sindicatos y organizaciones sociales argentinas se concentraron ante el Congreso, horas después de la aprobación de la ley que elimina el impuesto a las ganancias, para arropar al candidato oficialista, Sergio Massa, impulsor de esta medida que beneficia a casi un millón de trabajadores.
“Tengan la seguridad, tengan la tranquilidad, que el 10 de diciembre, si Dios y todos ustedes me dan la gracia de ser presidente, voy a convocar a un gobierno de unidad nacional”, expresó el actual ministro de Economía, único orador del acto, rodeado de los jerarcas sindicales y de las organizaciones sociales.
“Se siente, se siente, Massa presidente”, le respondió el público al pie del escenario en forma de T que se instaló frente al palacio legislativo, de cuyas ventanas colgaban banderas de organizaciones sindicales.
Massa destacó la presencia de los dirigentes de distintas centrales obreras, de las organizaciones sociales y del sector de la pequeña y mediana empresa para señalar que “la mesa de unidad de los argentinos” es la compuesta por “empresarios, trabajadores, organizaciones sociales y el Estado”.
“Nuestra patria necesita un gobierno de unidad nacional”, exclamó Massa.
La Confederación General del Trabajo (CGT), central sindical peronista, y las organizaciones sociales, cuyos dirigentes son parte o tienen colaboradores en el Gobierno de Alberto Fernández, acompañaron a Massa, que es el candidato de la coalición oficialista Unión por la Patria (nueva denominación del gobernante Frente de Todos).
En la Argentina de hoy, con un 124.4% de inflación interanual y un 40.1% de pobreza, el titular del Palacio de Hacienda fue el segundo candidato más votado, detrás del candidato de ultraderecha, Javier Milei, y de la coalición de centroderecha Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich. No obstante, la coalición peronista fue la tercera más votada.
En las elecciones del 22 de octubre, los tres candidatos más votados parten de un escenario de tercios.
“Va a haber en Argentina un gobierno que ponga en su lugar al Fondo Monetario Internacional para que no nos ponga más condiciones que nos lleven a la inflación”, prometió Massa si es presidente, respecto del programa que Argentina firmó en 2022 con el organismo multilateral para refinanciar 45 mil millones de dólares de deuda contraída en 2018, durante el Gobierno de Mauricio Macri (2015-2019).
La convocatoria del sindicalismo y de los movimientos sociales se hizo al día siguiente de que el oficialismo lograra en el Senado aprobar una iniciativa de Massa, que es la eliminación del impuesto a las ganancias para los salarios inferiores a 15 salarios mínimos vitales y móviles al mes, hoy 1.77 millones de pesos (4,842 dólares al tipo de cambio oficial), que beneficia a unos 800 mil trabajadores.
La oposición votó en contra por el costo para las provincias, ya que el impuesto a las ganancias es coparticipable, y porque Argentina tiene déficit fiscal sin fuentes genuinas de financiamiento, por lo que apela a la emisión monetaria y genera inflación.
La CGT celebró la eliminación del impuesto como “una victoria histórica de los trabajadores” y destacó que Massa tomó nota de “un viejo reclamo” de la entidad sindical.