Bolonia venció 2-1 en su visita a Balaídos tras remontar el gol inicial de Bryan Zaragoza, gracias a un doblete de Federico Bernardeschi que dejó sin capacidad de reacción a un Celta superado en cada duelo.
El equipo de Claudio Giráldez repitió el plan de su visita al Bernabéu, entregó la posesión y apostó por resistir, pero apenas generó peligro más allá del tanto de Zaragoza, quien aprovechó la carrera previa de Williot Swedberg y un resbalón de Lykogiannis para firmar su primer gol oficial con los celestes.
Bolonia dominó desde el inicio, creó las mejores ocasiones y encontró premio en el segundo tiempo: Bernardeschi desequilibró por derecha, forzó un penalti sobre Pobega que él mismo convirtió y más tarde castigó una pérdida de Iago Aspas con una definición sutil frente a Radu, después de que 2 acciones previas hubieran sido anuladas por el VAR por fuera de juego.
Ni los cambios de Giráldez ni la entrada de referentes ofensivos como Aspas o Jutglá modificaron el trámite; el Celta nunca logró sacudirse la presión ni el ritmo de un rival que impuso su físico y su futbol para cerrar una remontada incuestionable.

