La Comisión de Control, Ética y Disciplina de la UEFA ha prohibido al equipo polaco Legia Varsovia vender entradas a sus seguidores para su próximo partido a domicilio, por los incidentes de público registrados en el encuentro de la Liga Conferencia jugado en el campo del AZ Alkmaar neerlandés, el pasado día 5 (1-0).
La sanción, junto a una multa de 15 mil euros impuesta al conjunto polaco, es una decisión separada del expediente abierto por el órgano disciplinario de la UEFA hace una semana, ante la denuncia de los hechos ocurridos al final de dicho encuentro y los enfrentamientos violentos entre aficionados de ambos equipos.
Estos incidentes hicieron que la policía cerrara el recinto para evacuarlo de forma escalonada y evitar peleas en los alrededores del estadio.
Según medios polacos, los integrantes de la expedición del Legia trataron de salir cuanto antes para subir a su autobús, pero cuando el presidente del club, Dariusz Mioduski, y los miembros del equipo técnico, reclamaron a los agentes antidisturbios una explicación, fueron zarandeados y golpeados.
Desde el autobús, los jugadores del equipo polaco increparon a los policías, que exigieron a 2 de ellos, al portugués Josué, y al serbio Pankov, que bajasen del vehículo para después esposarlos y llevarlos a comisaría, por lo que no pudieron viajar con el resto de sus compañeros.
En los vídeos difundidos por los medios polacos se aprecia cómo miembros de la delegación polaca son agredidos con porras por varios policías.
