EUA confía en que el Gobierno de Perú investigue con “transparencia e independencia” si sus cuerpos de seguridad vulneraron los derechos humanos al reprender a miles de manifestantes en diciembre del año pasado, tras el autogolpe fallido del expresidente Pedro Castillo.
“Queremos subrayar el compromiso de los líderes de Perú, incluyendo a la presidenta Dina Boluarte, de que sí va a haber un proceso de investigación con transparencia e independencia”, dijo el secretario adjunto del Departamento de Estado para América Latina, Brian Nichols, en una entrevista con EFE.
Asimismo, Nichols hizo hincapié en que Perú es un “socio muy importante” de Estados Unidos, que cuenta con “órganos independientes” para desarrollar esta investigación con garantías y que eso ha sido “clave” para que tengan esta confianza.
Aquellas protestas dejaron más de 70 fallecidos en el país andino, 49 de los cuales fueron a raíz de enfrentamientos directos con las fuerzas armadas y policiales, además de decenas de heridos y detenidos.
La presidenta de Perú, Dina Boluarte, y el primer ministro, Alberto Otárola, son investigados por la fiscalía de la Nación por presunto genocidio, a raíz de las muertes de los manifestantes en varias ciudades peruanas, y han acudido a varias diligencias para responder sobre su responsabilidad política en los hechos.
La presidenta declaró recientemente que ya está tratando de verificar si hubo un “innecesario y desproporcionado” uso de la fuerza contra los manifestantes, tal como señaló un informe de la Oficina de Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
Aunque, Boluarte dijo en mayo que rechazaba “la supuesta existencia de ejecuciones extrajudiciales y la calificación de masacre” que hizo la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) sobre estos incidentes.
Otras organizaciones como Human Rights Watch (HRW) han definido la “aparente pasividad” del Gobierno peruano sobre los “abusos” como una “posible negligencia o incluso complicidad”.
Boluarte asiste esta semana al Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), que se desarrolla hasta este viernes en la ciudad de San Francisco.
Ahí ha coincidido finalmente con Biden, quien ejerce de anfitrión en la cumbre de líderes de la APEC, cuya presidencia pro tempore pasará de Estados Unidos al propio Perú en 2024.
APEC es un foro fundado en 1989 que promueve la integración comercial de 21 economías a ambos lados del océano Pacífico, las cuales representan aproximadamente el 60% del PIB mundial y el 40% de la población del planeta.