Río de Janeiro volvió a registrar una temperatura récord para el año, que llegó a los 42.6 grados y una sensación térmica de 53.3 grados en el barrio de Guaratiba.
El intenso calor en la tarde de este jueves llevó a decenas de bañistas a refrescarse al comienzo de la noche en las playas, como las turísticas y emblemáticas Copacabana e Ipanema, ya sin la presencia del inclemente sol.
La Pedra do Aproador, famosa por la vista de sus atardeceres en Ipanema, volvió a reunir a centenas de personas para despedir en este día al astro rey.
La temperatura récord en 2023 se había registrado en la tarde del domingo en la estación Irajá, uno de los referentes climáticos de la ciudad, con 42.5 grados centígrados y una sensación térmica de 50.5 grados.
El servicio municipal de emergencias Alerta Río indicó que este viernes y durante el fin de semana las altas temperaturas continuarán con los termómetros por encima de los 40 grados y con lluvias moderadas en las horas de la tarde.