El presidente del Comité de Ética de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Michael Guest, presentó este viernes una resolución para expulsar del Congreso a su compañero George Santos después de que una investigación revelara que el legislador se embolsó dinero para asuntos personales.
Este es el esfuerzo más serio para expulsar del Congreso a Santos, que también está imputado de 23 delitos, y que a principios de mes sobrevivió a un voto similar en la Cámara Alta.
Guest dijo que los resultados de la investigación ética interna del Congreso publicada este jueves son “más que suficiente para merecer un castigo” y que “el castigo más adecuado, es la expulsión”.
La Cámara de Representantes se encuentra en receso hasta el 28 de noviembre por la festividad de Acción de Gracias, así que la moción para su expulsión tendrá que esperar al menos hasta esa fecha.
Por su parte, Santos, que representa un distrito de Nueva York, ha convocado una rueda de prensa para el 30 de noviembre en las escalinatas del Congreso en la que podría anunciar su dimisión.
El informe ético, de 56 páginas, detalla los esquemas financieros con los que Santos transfería dinero que entraba a su campaña a sus cuentas personales.
A través de una empresa fachada, el legislador transfirió por lo menos 200 mil dólares en 2022, un dinero con el que hizo realizó pagos en tiendas de artículos de lujo como Hermès, así como a la plataforma de contenido para adultos OnlyFans y comidas, entre otros gastos.
Fuera del Congreso, Santos está acusado ante un Tribunal en Nueva York de fraude, lavado de activos, robo de fondos públicos, falso testimonio, conspiración contra Estados Unidos o falsificación de documentos, entre otros, unos cargos de los que se ha declarado no culpable.
Antes de conocerse sus presuntos delitos, el republicano ya había logrado notoriedad pública, famoso por la maraña de falsedades que urdió para ser elegido en los comicios de medio mandato de noviembre de 2022.
Tan solo 5 congresistas han sido expulsados en la historia de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, tres de ellos durante la Guerra Civil por apoyar al bando alzado. Los otros 2, condenados por delitos de soborno, en 1980 y 2002.