Este 21 de noviembre se cumplieron 13 años del asesinato del ex gobernador del estado de Colima, Jesús Silverio Cavazos Ceballos, quien cayó abatido a tiros en el año 2010, cuando se encontraba afuera de su domicilio.
Su esposa, la señora Idalia González Pimentel de Cavazos, como todos los años, colocó un arreglo floral en el sitio donde cayó abatido el ex gobernador.
Este año, el arreglo simulaba lo que pudiera ser una postal, como siempre, con pétalos de rosas de colores amarillas, rojas y en menor proporción en tono rosa, los cuales fueron colocados sobre un tendido de pétalos de crisantemo blancos.
En las 4 esquinas y en el borde de toda la postal, se colocaron los pétalos amarillos, los cuáles hacían excelente contraste con los pétalos color rojo, salpicados de los pétalos en color rosa, que daban la impresión de ser blancas.
En la parte central del arreglo, en pétalos color amarillo el número “10”, como el que usaba en sus uniformes deportivos de futbolista, deporte del cuál fue un apasionado.
En el arreglo floral no se colocó ninguna veladora, ni tampoco ninguna leyenda.
El arreglo floral, ubicado sobre el empedrado de la calle, contrastaba con el color blanco del machuelo, pintado recientemente, el cual protegía la jardinera bien cuidada, entre la banqueta y la acera de la calle.
Esta vez, solo la señora Idalia, su hijo y sus hijas, se esmeraron en la colocación del arreglo para recordarle a la gente que ahí, en ese mismo lugar un 21 de noviembre de 2010, aproximadamente a las 10:00 de la mañana cayó abatido a tiros el ex gobernador del estado, quien del lugar fue levantado aún con vida, falleciendo posteriormente cuando recibía los primeros auxilios.
Al lugar donde se colocó el arreglo floral, llegaron algunas personas, algunos tomaban fotografía con su teléfono móvil, otros murmuraban una oración por el eterno descanso del alma de Jesús Silverio.
Doña Rosa, vecina de la colonia El Diezmo, se lamenta de no llevar su celular para tomarle fotos al lugar, “andaba caminando y diario sigo esta ruta, pero mire qué bonito arreglo le hicieron”, decía.
Luego recordaría que a ella le tocó conocer al ex gobernador, “yo tenía un negocito de reparación de plástico, seguido me mandaba a sus ayudantes a que le hiciera algunos trabajos, luego el pasaba a saludarme y a preguntarme cuánto me debía. Siempre fue muy buena gente, muy atento”, decía.
Por la calle José G. Alcaraz, donde vivía el ex mandatario estatal, muy transitada en la actualidad, los automovilistas aminoraban la marcha para ver el arreglo y recordar que hace ya 13 años, en ese sitió perdió la vida un joven político tecomense.
Hasta donde se encuentre Jesús Silverio, elevo una oración, por el eterno descanso de su alma…
Descanse en paz.