El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) anunció el programa “ComunidadEs Igualdad” para promover la igualdad de género en 3 estados del país: Oaxaca, Puebla y Nuevo León.
En México, al menos 70.1% de las mujeres mayores de 15 años han experimentado algún tipo de violencia en su vida, siendo el ámbito de pareja (25.6%) en el que más la sufren, seguido del comunitario (23.3%), laboral (22.5%), escolar (17.4%) y el familiar (10.3%), según la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares de 2021.
Concretamente, los datos del mismo estudio indican que la prevalencia de violencia contra las mujeres en Oaxaca asciende a 67.1%, mientras que en Puebla se ubica en 70.8% y en Nuevo León en el 68.1%.
Por eso, esta iniciativa en la que la Fundación Iberdrola México es aliada, busca promover la equidad y trabajar hacia la consecución de la igualdad sustantiva, con el objetivo sensibilizar sobre cuestiones de género y derechos humanos, y generar un impacto positivo en más de 70 mil personas.
El proyecto, que es la primera colaboración del PNUD con una empresa privada, quiere asentar las bases de la importancia que tiene el rol del sector privado en el acompañamiento para que la comunidad de naciones logre los Objetivos de Desarrollo Sostenible, según explicó Lorenzo Jiménez de Luís, representante residente del PNUD en México.
“No subrayamos nunca suficientemente la importancia que tiene el sector privado para el logro de estos objetivos, que es muy importante en temas productivos y económicos, pero también en temas sociales”, destacó en la presentación de la iniciativa.
Por su parte, Enrique Alba, director ejecutivo de Iberdrola México, resaltó que para ellos el dividendo social es igual de importante que el económico, siendo una “prioridad absoluta” erradicar cualquier violencia contra la mujer.
Los propósitos de la alianza
El propósito fundamental de este convenio entre PNUD e Iberdrola México es diseñar materiales y actividades destinados a sensibilizar a más de 25 mil niños, niñas y adolescentes sobre los derechos humanos, así como los derechos de las mujeres y las masculinidades positivas, no violentas y responsables.
Otro de los objetivos es trasladar conocimientos e implementar guías de capacitación elaboradas en colaboración con un centenar de instituciones educativas por estado, así como con organizaciones locales.