Armando Reyna, coordinador de la bancada de Morena en el Congreso del Estado, consideró que la alcaldesa de Manzanillo, Griselda Martínez, se excedió en los señalamientos que hizo en contra de varias personas de la sociedad colimense y, desde su perspectiva, opinó que la presidenta municipal porteña “trató de chantajear al partido”.
Entrevistado respecto a la supuesta expulsión de Griselda Martínez de Morena, Armando Reyna dijo que se trató de un procedimiento que inició el Comité Ejecutivo Nacional cuyas “razones ya son de dominio público. Es un tema que está llevándose a través del partido, a través de la Comisión de Justicia y ellos tomaron una decisión basada en los hechos”.
Comentó que, desde su punto de vista, la polémica con la presidenta municipal de Manzanillo no va a “meterle más ruido” al proceso electoral local interno de Morena. “Yo creo que no, y ya definiéndose las candidaturas, cada quien debe ponerse a trabajar en lo suyo, porque lo que sigue es el proceso. No nos debemos desviar en temas que no tiene caso seguirnos desgastando”.
Armando Reyna afirmó que, desde ahora, “debemos empezar a ver la unidad del partido, debemos empezar a trabajar en ese sentido. Ya no se debe desviar la atención con estos temas”.
El coordinador de bancada agregó: “Yo siempre en mis declaraciones dije que todos en Morena estábamos dentro, aunque algunos no estábamos de acuerdo en algunas cosas y era una forma de manifestar la inconformidad y de protestar, pero yo creo que todo tiene un límite”.
Enfatizó que en las declaraciones Griselda Martínez, “quien acusa tiene la obligación de probar. Son sus dichos y mientras no se prueben, siguen siendo dichos, y si no se presentan las pruebas, van a quedar como mentiras”.
Destacó, finalmente, que Griselda Martínez “quiso presionar, quiso chantajear, y en ese amague que hizo, creo que se le pasó la mano”.