El presidente Andrés Manuel López Obrador acusó a la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) de ser un “sector político” de la mayor fuerza de oposición, el Partido Acción Nacional (PAN), por oponerse a sus reformas.
“De la Coparmex, están en su derecho, ellos siempre han tenido una postura muy a favor del PAN, ni parecen ni han sido en sentido estricto defensores de empresarios, son como una especie de sector político del PAN”, expresó el mandatario en su rueda de prensa diaria.
El mandatario federal reaccionó al posicionamiento de la Coparmex, que el martes rechazó la propuesta constitucional del presidente de desaparecer los reguladores autónomos para usar el dinero en pensiones y programas sociales.
La patronal pidió defender al Instituto Nacional de Acceso a la Información (INAI), la Comisión Federal de Competencia (Cofece), la Comisión Reguladora de Energía (CRE), la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) y el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), que México está obligado a tener en tratados comerciales.
“El argumento de ‘austeridad’ o generación de economías no es sostenible ya que los cinco organismos que se pretenden eliminar en este 2024 apenas costarán 3,900 millones de pesos, representan solo el 0.04% del presupuesto total”, apuntó la Coparmex en un comunicado.
El mandatario dijo respetar su opinión, pero reafirmó sus críticas.
“Nosotros lo que sostenemos, a diferencia de ellos, es que todos estos organismos los crearon para proteger negocios lucrativos, buenos negocios para particulares, malos negocios para el pueblo de México”, argumentó.
La desaparición de los reguladores autónomos será una de las cerca de 10 reformas constitucionales que López Obrador presentará el 5 de febrero, Día de la Constitución, para establecer la agenda de su último año de mandato, que concluye en octubre.
Entre las iniciativas también está la de elevar siempre el salario mínimo por encima de la inflación y una reforma de pensiones para que los trabajadores reciban su sueldo completo al retirarse con apoyo del Gobierno, lo que también ha despertado críticas de las cámaras empresariales.
