El comisionado general de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA), Philippe Lazzarini, dijo este lunes que cada vez tiene más dificultades para operar en la ciudad de Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, donde Israel planea incrementar la ofensiva terrestre.
Y aseguró que debido a los planes del Gobierno israelí, “existe una profunda sensación de pánico” en la ciudad de Gaza.
En una rueda de prensa en Bruselas, tras reunirse con los ministros de cooperación de la Unión Europea, Lazzarini explicó que ayer, por primera vez en Rafah, la ONU no pudo operar con el nivel mínimo de protección que ofrece la policía local y que sus camiones fueron saqueados.
“Debido a que no estaba la policía local, nuestros camiones fueron saqueados y bandalizados en la frontera por centenares de jóvenes”, dijo el jefe de la UNRWA.
Según Lazzarini, muchos policías han muerto en los últimos días, por lo que las fuerzas del orden locales podrían dejar de funcionar.
“Los próximos días nos dirán si somos capaces de continuar operando en un ambiente extremadamente difícil”, dijo, el comisionado general de la agencia, que habló de que “la posibilidad de hambruna, sobre todo en el norte de la Franja, donde hay aproximadamente 300 mil personas a las que no se le ha podido dar ayuda humanitaria desde el 20 de enero.
Lazzarini dijo que en estos 4 meses de guerra, el 5% de la población de Gaza -que es aproximadamente de 2 millones de personas- ha muerto, está herida o en paradero desconocido.
Ministerio de Sanidad de la Franja, en manos de Hamas, calcula que desde octubre han muerto más de 28 mil personas.