En un momento donde la educación y el deporte buscan sinergias para formar ciudadanos íntegros y comprometidos, la Universidad de Colima, con el apoyo invaluable de Sicar Farms, ha dado un paso firme hacia la consolidación de ese ideal.
Y es que la reciente entrega de 30 becas Universidad de Colima Donativos a la Excelencia Deportiva no es solo un reconocimiento al talento y esfuerzo de nuestras y nuestros estudiantes atletas; es una apuesta por el desarrollo integral de la juventud y un recordatorio de que la excelencia es un camino que se construye día con día, tanto en las aulas como en los campos deportivos.
La iniciativa de Sicar Farms, más allá de ser un acto de generosidad, refleja una profunda comprensión de la responsabilidad social corporativa. Al invertir en nuestros jóvenes, no solo están apostando por el futuro del deporte, sino por el desarrollo de una sociedad más educada, saludable y comprometida. Esa colaboración entre la academia y la empresa privada es un modelo a seguir, demostrando que el progreso colectivo es posible cuando se unen esfuerzos en pos de un objetivo común.
Además, el llamado de nuestro Rector Christian Jorge Torres Ortiz Zermeño a los beneficiarios de esas becas resuena con un eco particular: la importancia de no interrumpir los estudios y competir con la mayor disciplina. Esas palabras no son meros consejos; son la esencia de lo que significa ser un estudiante atleta en la Universidad de Colima.
La disciplina, la perseverancia y el compromiso con la excelencia son valores que trascienden el ámbito deportivo, modelando individuos capaces de enfrentar los desafíos de la vida con determinación y resiliencia.