Autoridades de Nuevo León atribuyeron el asesinato de 4 hombres y 2 mujeres a disputas de cárteles del crimen organizado tras descartar la versión de un fusilamiento.
El secretario general de Gobierno del estado, Javier Navarro, dijo en conferencia que también se investiga el hallazgo de un bebé abandonado en una iglesia que podría ser hijo de una de las mujeres asesinadas.
El niño de cerca 6 meses apareció en una iglesia del municipio de San Nicolás, conurbado a Monterrey.
“Todo indica que es una cuestión de problemas entre cárteles”, aseguró el funcionario estatal.
Tras el multihomicidio, uno de los más sanguinarios en el estado en lo que va del año, medios locales hablaron de un fusilamiento por la forma en la que las autoridades hallaron los cuerpos: descalzos, atados de los pies con una cuerda, cerca de un muro y con el llamado “tiro de gracia”, un disparo en la cabeza.
Pero Navarro insistió en desmentir dicha versión: “No fue un fusilamiento, fue una ejecución” y añadió que no hay evidencias de que los hayan ultimado contra una pared.
Asimismo, afirmó que ya hay “mucha información” del caso, pero no proporcionó mayores detalles al limitarse a afirmar que las víctimas tenían antecedentes penales y habían estado internados en centros penitenciarios.
Insistió en que el gobernador del estado, Samuel García, instruyó realizar las investigaciones y procedimientos para resolver el caso y que no se repita un suceso como éste.
En el tema del menor de edad hallado en la iglesia Resurrección, comentó que se indaga si tendría relación con una de las mujeres ultimadas.
Una de las jóvenes muertas tenía un chupón en una de sus manos y horas más tarde apareció el bebé abandonado.
Hombres que trabajaban en el templo encontraron al menor de edad la noche del martes en los baños.
Su estado de salud se evaluó como bueno y lo entregaron al sistema de Desarrollo Integral de la Familia (DIF) Capullos para su resguardo.
