La sede del Paris Saint Germain fue registrada de nuevo a comienzos de este mes dentro de la investigación judicial francesa por presuntas irregularidades fiscales en el fichaje del brasileño Neymar, en 2017.
El registro del edificio en la localidad de Boulogne Billancourt, en el que además está la oficina parisina de la cadena deportiva BeIN Sports, fue confirmado por fuentes judiciales al diario Le Monde, aunque sin ofrecer más detalles.
Este registro sigue a otro realizado en enero por agentes de la Inspección General de la Policía Nacional (IGPN) y de la Oficina Central de Lucha Contra la Corrupción y las Infracciones Fiscales (Oclciff) bajo la supervisión de varios magistrados.
Ese primer registro buscaba información dentro de la investigación sobre un presunto trato de favor oficial cuando el PSG fichó en 2017 a Neymar, procedente del Barcelona, por 222 millones de euros, el mayor traspaso de la historia del futbol.
Un portavoz del PSG declaró que la entidad “colabora plenamente con todas las partes en este asunto, en el que el club es una parte perjudicada, y que pondrá finalmente término a las informaciones falsas que circulan”.
La investigación intenta dilucidar el papel del entonces director de comunicación del club, Jean Martial Ribes, inculpado en este caso por corrupción y tráfico de influencias, y del que fue vicepresidente de la Asamblea Nacional Hugues Renson, entonces diputado del partido del presidente francés, Emmanuel Macron.
Se sospecha, sobre la base en particular de conversaciones entre ellos, que ambos habrían maniobrado para conseguir ventajas fiscales cuando el club de la capital francesa compró Neymar al Barcelona por 222 millones de euros, el fichaje más caro de la historia.
En los mensajes interceptados, se alude a actuaciones ante el que en ese momento era ministro de Hacienda, que es el actual titular de la cartera de Interior, Gérald Darmanin.