El presidente chino, Xi Jinping, pidió a las fuerzas armadas nacionales situadas en el este del país que “intensifiquen” su “adiestramiento en condiciones reales de combate para elevar su capacidad para luchar y vencer”, informó hoy la agencia oficial Xinhua.
Durante una visita a la ciudad oriental de Nanjing, Xi instó al Comando del Teatro de Operaciones del Este del Ejército Popular de Liberación (EPL, Ejército chino), a “mejorar la planificación de la guerra y el combate”.
“En un momento en que el mundo ha entrado en un nuevo período de turbulencia y transformaciones, la situación de la seguridad en China se enfrenta a una creciente inestabilidad e incertidumbre”, señaló el líder chino, que es también jefe del Ejército por ostentar el puesto de presidente de la Comisión Militar Central.
Xi enfatizó la necesidad de “centrarse en los objetivos del centenario del EPL”, que se celebrará en 2027, fecha para la cual está previsto que China “construya un Ejército completamente moderno”.
El Teatro de Operaciones del Este del EPL, al que se dirigió Xi, es responsable de vigilar el estrecho de Taiwán, isla cuya soberanía Pekín reclama desde que en 1949 los nacionalistas del Kuomintang se replegaran allí tras perder la guerra contra el ejército comunista y para cuya “reunificación” no ha descartado el uso de la fuerza.
La tensión en la zona es alta desde agosto del año pasado, cuando la entonces presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, visitó Taiwán, un viaje que enfureció a Pekín.
Desde entonces, aviones militares chinos realizan incursiones de forma rutinaria en la Zona de Identificación Aérea (ADIZ) de Taiwán.
Asimismo, buques militares estadounidenses han atravesado el estrecho en los últimos meses en defensa de “la libertad de navegación”, algo que Pekín describe como una provocación.
La isla autogobernada es uno de los principales motivos de fricción entre China y EUA, ya que el país norteamericano es el principal proveedor de armas de Taiwán.