Las autoridades canadienses advirtieron que el país se enfrenta a otra temporada de incendios forestales al menos tan devastadora como la de 2023, cuando se quemaron la cifra récord de 18 millones de hectáreas de bosque, 2.5 veces más que el anterior récord establecido en 1995.
El ministro de Emergencias canadiense, Harjit Sajjan, informó en una rueda de prensa de que en estos momentos, antes del inicio de la temporada de incendios, existen más de 70 fuegos forestales activos, en su mayoría en el oeste del país, que sufre una inusual sequía.
Gran parte de esos incendios están activos desde el año pasado.
Sajjan añadió que el invierno ha sido mucho más seco y caluroso de lo habitual y que se anticipa que las temperaturas en los próximos meses serán también superiores a lo normal.
De diciembre a febrero, las temperaturas medias del país han sido 5.2 grados superiores a las de los registros históricos que se iniciaron en 1948.
“Es evidente que los incendios forestales representan un significante desafío para Canadá a medida que los impactos del cambio climático se intensifican”, declaró el ministro canadiense.
Los miles de incendios forestales que Canadá experimentó el año pasado a consecuencia de las elevadas temperaturas y sequedad obligó al país a requerir la asistencia de más de 5 mil bomberos extranjeros llegados de países como Estados Unidos, México, Costa Rica, España, Francia, Australia y Nueva Zelanda.