Los habitantes de Acapulco salieron este domingo a ejercer su derecho a voto sin dudas pero con intranquilidad tras los últimos hechos violentos y la inseguridad que se vive en la zona.
En declaraciones para EFE, el habitante de la colonia Progreso, Antonio Córdova, dijo que estaba contento por la oportunidad que tenía para votar.
“No, en ningún momento lo dudé, independientemente de todo lo que ha habido, hay que venir a votar como todo ciudadano”, afirmó.
En las casillas electorales ubicadas en la colonia Progreso no se observó presencia de policías o resguardo de autoridades Ministeriales, lo que provocó cierta intranquilidad entre los ciudadanos.
Así lo indicó a EFE María Guadalupe Durán, quien dijo que desde hace semanas junto con su esposo estaban preparados para poder salir desde muy temprano y ejercer su voto.
“No dudamos, porque vivimos aquí muy cerquita y nada más le dije a mi esposo pues a ver qué pasa, así como está, como dice usted, la inseguridad vamos a ver. En otros lados hay mucha guardia. Debería haber, sobre todo en todas las casillas”, señaló.
Acapulco, ubicado en Guerrero, ha vivido numerosos episodios de violencia en las últimas semanas, entre ellos el asesinato a balazos este miércoles en la vecina localidad de Coyuca de Benítez de José Alfredo Cabrera Barrientos, candidato a presidente municipal de la coalición opositora del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD).
Millones de mexicanos y mexicanas se disponen a emitir su voto desde primera hora en las elecciones más grandes de la historia de México y de las que podría emerger la primera mujer presidenta de la historia del país, entre las 2 principales candidatas: la oficialista Claudia Sheinbaum y la opositora Xóchitl Gálvez.
Estos comicios también son ya los más violentas de la historia de México, con al menos 30 aspirantes asesinados.
Según informó el Instituto Nacional Electoral (INE), hay 22 casillas electorales canceladas por problemas comunitarios o de inseguridad en 10 estados, con especial incidencia en Chiapas y Michoacán por lo que 126 mil ciudadanos tendrán que votar fuera de sus comunidades.