La organización Human Rights Watch (HRW) celebró la condena de 8 meses de prisión a 3 aficionados del Valencia en un tribunal de esta ciudad por proferir insultos racistas contra el jugador del Real Madrid, Vinicius Júnior, e instó a las autoridades españolas a impulsar estrategias para combatir el racismo sistemático.
“El racismo no tiene cabida en el deporte”, señala el organismo en X, donde ha publicado un vídeo en el que el deportista, con lágrimas en los ojos, destaca que España “no es un país racista” pero que “sí hay mucho racista” en el país.
En su mensaje, la entidad insta al Ejecutivo español a impulsar una estrategia que proteja a las minorías raciales y étnicas de la discriminación, la violencia racista y las desigualdades: “La persecución del discurso de odio racista no debe ser el final de la respuesta de un gobierno al racismo sistemático”, subraya.
El pasado 21 de mayo de 2023, en un enfrentamiento entre el Valencia y el Real Madrid, Vinicius denunció haber recibido insultos racistas por parte de seguidores ubicados en la Grada de Animación.
En el partido, el jugador identificó a uno de los acusados y, tras la denuncia de LaLiga esa misma noche, se identificó a otros 2 con las cámaras internas del Valencia.
Los 3 han sido condenados a 8 meses de prisión y a 2 años sin entrar a estadios de futbol, además del pago de las costas.
No obstante, se trata un acuerdo de conformidad alcanzado entre la Fiscalía, las acusaciones y las defensas, e implica que los acusados no entrarán en prisión al haber incluido en el pacto la suspensión de la pena de cárcel.
La sentencia es la primera sanción penal que se aplica en España por ese tipo de comportamientos en campos de futbol, y ha sido especialmente celebrada por LaLiga, que asegura que “detectará, denunciará y habrá consecuencias penales” para los seguidores que se dedican a insultar en los estadios de futbol.