El fiscal especial Jack Smith pidió este lunes a un tribunal federal de apelaciones que restaure el proceso contra el expresidente de Estados Unidos Donald Trump por el mal manejo de documentos clasificados, un caso que el pasado mes fue desestimado por una jueza federal de Florida.
En un escrito remitido al Undécimo Circuito del Tribunal de Apelaciones de EUA, con sede en Atlanta (Georgia), Smith señaló que “carecía de mérito” la decisión de la magistrada Aileen Cannon de desestimar el caso porque la designación del fiscal especial no contaba con autoridad constitucional.
En la moción de más de 80 páginas, Smith señaló que la decisión de la magistrada “no tuvo lo suficientemente en cuenta la larga historia de los nombramientos de fiscales especiales del Fiscal General” de Estados Unidos y asimismo “malinterpretó los estatutos” que autorizaban la designación de estos funcionarios.
“Desde antes de la creación del Departamento de Justicia hasta la actualidad, los Fiscales Generales han designado en repetidas ocasiones fiscales especiales e independientes para manejar investigaciones federales”, recalca Smith, quien fue designado por el actual fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, en noviembre de 2022.
La moción ve como un error que la magistrada Cannon aludiera de igual modo a variaciones a lo largo de los años en el mecanismo mediante el cual se han designado los fiscales especiales, según los cuales no todos los fiscales especiales han sido nombrados por el Fiscal General.
A mediados de este mes, la jueza federal Aileen Cannon dio la razón a los abogados del expresidente y candidato republicano Donald Trump (2017-2021), quienes habían argumentado que la designación de Smith era ilegal y violaba la “cláusula de nombramientos” de la Constitución estadounidense.
El caso del mal manejo de documentos oficiales y confidenciales, los cuales el exmandatario los mantuvo en su residencia de Mar-a-Lago, en Florida, y por el que además afrontaba cargos de obstrucción y retención ilegal, es uno de los 4 procesos judiciales que afronta el republicano.
Cannon señaló en julio pasado que el nombramiento de Smith no siguió los procedimientos habituales, entre los que figura la confirmación de este por parte del Senado.
Agregó que el Congreso tiene un papel fundamental en el nombramiento de funcionarios especiales y que “ese papel no puede ser usurpado por el Poder Ejecutivo ni difundido a otros lugares, ya sea en este caso o en otro, ya sea en tiempos de mayor necesidad nacional o no”.