Las recientes manifestaciones en contra y a favor, además del intenso debate que han surgido en torno a las reformas constitucionales al Poder Judicial, no solo han captado la atención de los medios de comunicación y la sociedad, sino que también han motivado a diversas instituciones públicas o privadas, a tomar una postura ante el complejo panorama.
Así, nuestra Universidad de Colima (UdeC), consciente de su papel como un referente educativo y formativo en el estado y la región, emitió un posicionamiento claro y responsable, en el que se hacía un “llamado respetuoso al Congreso de la Unión y a todos los actores involucrados para que se privilegie el diálogo incluyente”.
Ese llamado es más que oportuno en un momento donde las divisiones y los intereses pueden oscurecer el verdadero propósito de las reformas: fortalecer la justicia y garantizar los derechos de todos los y las mexicanas.
La Universidad, en su comunicado, subraya la necesidad de que cualquier discusión sobre el futuro de las instituciones judiciales se desarrolle en un ambiente de respeto, transparencia y participación plural. Ese enfoque es esencial para evitar que las decisiones se tomen de forma incorrecta.
Nosotros, nosotras, tenemos el compromiso con la construcción de un México más justo y democrático. Ello no es nuevo, pero en este contexto adquiere una relevancia especial. Desde su misión educativa y formativa, la UdeC se posiciona como un actor clave para fomentar la participación ciudadana y la construcción de consensos en la sociedad. Su voz, como la de otras instituciones académicas, es fundamental para enriquecer el debate público en libertad.
En estos tiempos de cambio, es vital que todas y todos los actores involucrados, desde legisladores hasta ciudadanos, ciudadanas, escuchen y atiendan el llamado al diálogo incluyente. Solo a través de un proceso adecuado se podrá fortalecer al Poder Judicial y, por ende, a la democracia en México.