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COLUMNA: Ciencia y futuro

Por Redacción Sep26,2024

La microbiota intestinal: qué, quiénes y cómo los microrganismos bacterianos resolverían enfermedades como la obesidad

Por Doctor José Luis Rodríguez Mejía*

La pandemia de obesidad en el mundo ha ido cambiando en los últimos 30 años, modificando patrones sociales, de salud pública y de consumo alimenticio, la cual, se asocia al incremento de grasas almacenadas en nuestro cuerpo, originando cambios fisiológicos que a su vez modifican factores bioquímicos y moleculares que condicionan la salud del individuo. Los humanos desarrollamos varias comorbilidades (coexistencia de dos o más enfermedades en una persona) una vez que hemos alcanzado el estado de obesidad, en la que, en etapas tempranas, se observa una irritabilidad intestinal, tránsito lento, constipaciones e inflamación del colon, procesos que evolucionan a etapas severas en las que se compromete la estructura y la funcionalidad del tejido intestinal, promoviendo la desestabilización de varios sistemas.

En relación con lo anterior, el sistema metabólico condiciona a una resistencia a la insulina en la mayoría de los casos dando lugar a la aparición del síndrome metabólico, etapa en la cual, el sistema circulatorio se compromete y expone súbitas subidas de presión arterial, hígado graso, incremento de la grasa visceral, colesterolemia como factor de obstrucción arterial, y en muchos sentidos, las causas originadas crean la antesala para diabetes, cardiopatías, enfermedades inflamatorias intestinales, fallo hepático y en casos extremos muerte por falla orgánica múltiple.

La importancia de desarrollar estrategias para su prevención o tratamiento es, en los últimos 10 años, el objetivo particular de muchas investigaciones, generando información novedosa sobre cómo esta enfermedad está vinculada con malos hábitos alimenticios, ineficiencia metabólica y un cambio en la diversidad y abundancia de la microbiota intestinal (antes flora intestinal) vinculada con el estado de salud del individuo. Este vínculo se observa en cada rincón y superficie de nuestros cuerpos y es de esperarse una gran diversidad de microorganismos habitándonos, contribuyendo con la exclusión de patógenos externos y evitando la proliferación de patógenos internos conocidos como patobiontes.

Son cerca de 100 trillones de microorganismos que nos habitan e interactúan, durante un estado de salud favorecen la producción de metabolitos esenciales para el mantenimiento y resguardo de su hábitat ya que esta interacción es de ida y vuelta formando un eje central de interacción con los sistemas inmunológico, nervioso central y periférico. Malos hábitos alimenticios y falta de actividad física son factores que conllevan a la obesidad y a su vez, son estos los que modifican el hábitat de todo nuestro microbioma, sin embargo, es el sistema digestivo el más afectado, puesto que se encuentra estrechamente relacionado con la microbiota, y esta a su vez, modula cambios fisiológicos y moleculares en dicho sistema. Grupos bacterianos como los Firmicutes y Bacteroidetes son los de mayor abundancia y en los que se agrupan especies bacterianas con una contribución específica a un estado de salud u obesogénico.

Como parte de la multidisciplinariedad del proyecto que se ha desarrollado en el Centro Universitario de Investigaciones Biomédicas de la Universidad de Colima (CUIB), en el laboratorio somos parte de un grupo de investigación nacional que estudia de qué manera la obesidad impacta en individuos diabéticos, la contribución por parte del laboratorio al proyecto es a través de aproximaciones fisiológico-moleculares y microbiológico-moleculares. Con el uso de un modelo animal se estudia la inflamación intestinal presente en la obesidad originada por una dieta alta en grasas y cómo contribuye al cambio físico, fisiológico, molecular y de su microbiota.

Así también, se ha implementado una estrategia para poder identificar de qué manera los microrganismos bacterianos se comunican con las células animales, de qué tipo de bacterias se tratan, qué tipo de compuestos y cuáles serían los efectos sobre el sistema digestivo, es decir, cuál es su contribución y si es beneficiosa o no para el estado de salud o por el contrario al establecimiento de la obesidad y su mantención. Hemos encontrado una lista extensa sobre cuáles serían estos participantes microscópicos además de cuál sería su participación en la generación de cambios a nivel anatómico, fisiológico molecular, y la ecología de la microbiota influenciada por la dieta alta en grasas.

Contamos con los primeros acervos microbiológicos para esta enfermedad en este modelo animal, aislados bacterianos aerobios y el análisis de su diversidad bacteriana. Estamos interesados en la prospección de este acervo microbiológico y la caracterización de aislados bacterianos cuya importancia radicará en los productos de su metabolismo o respuestas tejido específicas que pudieran generar en modelos celulares. Continuamente desarrollamos estrategias para el estudio de esta enfermedad, lo que abre la posibilidad de contar con la participación de estudiantes de licenciatura y posgrado para el desarrollo de estrategias de investigación multidisciplinaria que permitan contribuir con información novedosa acerca de este padecimiento y su estrecha relación con la microbiota intestinal.

La información aquí vertida forma parte de la investigación desarrollada como parte de mi Estancia Posdoctoral por México 2022 (1)176337, mi trabajo contribuye al proyecto CF-2019/21854.

*Realiza una estancia posdoctoral por México en el Centro Universitario de Investigaciones Biomédicas de la Universidad de Colima.

charhoju@gmail.com y pv_jrodriguez@ucol.mx

Las opiniones expresadas en este texto periodístico de opinión, son responsabilidad exclusiva del autor y no son atribuibles a El Comentario.

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