El bono de supervivencia que se autorizó el Cabildo del Ayuntamiento de Manzanillo, por instrucciones de la alcaldesa Griselda Martínez, significa “un golpe severo a las arcas municipales, que debido a que no ha habido una total transparencia en el proceso de entrega-recepción, no se sabe qué estado guardan”, aseguró la diputada Andrea Naranjo.
La también presidenta de la Junta de Gobierno y Coordinación Política del Congreso del Estado, al subir a tribuna, señaló que pretendía abordar este tema que ha estado en la agenda política estatal en los últimos días y que no debe pasar desapercibido, no solo por las repercusiones económicas que tendría en el Ayuntamiento de Manzanillo, sino por cómo podría iniciar la próxima administración municipal que estará encabezada por Rosi Bayardo.
La coordinadora de la bancada de Morena de la Sexagésima Primera Legislatura mencionó que los 25 millones de pesos que se aprobó el bloque municipal de la presidenta Griselda Martínez, en el Cabildo de Manzanillo, representan un golpe severo a las arcas municipales, “para darnos una idea, esta cantidad garantizaría cerca de 6 años de entrega de ColiBecas Mochilas y Útiles a estudiantes de Manzanillo. Se garantizarían también 3 años de entrega de uniformes escolares a todas y todos los estudiantes de Manzanillo”.
Añadió que “se podrían garantizar casi el 70% del monto de Mi ColiBeca para Empezar, que es un apoyo que se da a las familias que tienen estudiantes de educación básica”.
Andrea Naranjo dijo que “este bono millonario es inmoral e ilegal y pinta de cuerpo entero a un Gobierno que en un tiempo se dijo de izquierda, pero que solo piensa en sus propios intereses, a costa del pueblo de Manzanillo”.
A lo anterior, dijo, “hay que sumar la compra de un predio a un particular, por un monto de 40 millones de pesos, sin justificación alguna; además, hay que sumar lo que ha estado ocurriendo en el Consejo de Administración de CAPDAM, que al momento se tiene conocimiento que por la falta de pago adecuado del ISR de los trabajadores, del ejercicio fiscal de 2019, se adeudan aproximadamente 20 millones de pesos y esto sin agregar lo de los ejercicios fiscales de 2020 y 2021”.
Finalmente, desde el punto de vista de Andrea Naranjo, la actual administración porteña, “lejos de ser una administración que ha cuidado las finanzas, las ha derrochado”.