La radio pública y universitaria, debe continuar en el fortalecimiento de sus plataformas digitales.
Por E. Alejandro González Gutiérrez*
Por más de un siglo, la radio se ha posicionado en múltiples culturas y audiencias como un medio tradicional de entretenimiento, educación y difusión. Ha sido un importante modelo de negocio para las grandes cadenas de radio alrededor del Mundo, pero también un medio capaz de transformar comunidades y poblaciones. Sin embargo, la radio ha tenido la necesidad (incluso la urgencia) de evolucionar hacia nuevas formas de comunicar, informar y entretener, adaptándose a los contextos y características cambiantes de sus públicos.
Más allá de los aspectos técnicos de cobertura y operación, la radio hace frente a diversos desafíos del panorama actual, como la incorporación de herramientas de inteligencia artificial generativa (IAG); el narrowcasting plantea una evolución obligada del tradicional broadcasting, donde la audiencia se encuentra cada vez más segmentada y conectada en tiempo real e inmediato. El podcast continúa su tránsito hacia contenidos más transversalizados, donde las emisoras se apoyan con formatos pensados y realizados justo aprovechando sus propias características, el apogeo del podcast como un reservorio, comenzó un cambio.
Ante este panorama, la tarea de las emisoras radiales no se limita a poner a disposición de los radioescuchas los programas y espacios disponibles, sino a generar contenido especializado en las plataformas donde se encuentran los distintos públicos. Esto requiere el desarrollo de estrategias definidas hacia la consolidación de un menú sonoro construido de la mano de quienes piensan y viven la radio, así como de los propios radioescuchas y su forma de interactuar con las emisoras y sus diferentes canales.
En ese contexto, la IAG coloca sobre la mesa varios aspectos en su incorporación en la producción radiofónica cotidiana que pueden tanto complementar como sumar compromisos éticos, legales, laborales y sociales; propicia mayor personalización a través de herramientas que generen una experiencia adaptativa al segmento de oyentes, transformación del espacio sonoro hacia vivencias más inmersivas, mayor especialización en la analítica y diseño de contenidos basado en datos duros, optimización en la creación de producciones sonoras versátiles para diferentes canales digitales, métricas que permitan valorar cómo se avanza y el rumbo de las estrategias, entre otras acciones. También revela para su atención dimensiones legales, éticas, tópicos sobre la privacidad y uso de datos personales y mucho más.
En el caminar frente a dichas oportunidades para la optimización, innovación y creatividad radiofónica, el medio deberá atender los desafíos y limitaciones que se asoman; en el recopilar y analizar datos sobre las audiencias, será fundamental enmarcar la práctica en un contexto seguro. La creatividad humana es esencial en todos los procesos, por lo que cuidar un equilibrio en el uso y aplicación de la IAG será fundamental. Aspecto importante seguirá siendo el recurso económico, ya que muchas de las aplicaciones en su versión ilimitada, representarán la necesidad de una licencia para su uso y en particular, al generar contenido para broadcast y plataformas digitales, por ello, la propiedad intelectual cobra atención.
En consecuencia, transitar hacia la inclusión de herramientas de la Inteligencia Artificial Generativa en las estrategias para fortalecer las plataformas digitales y contenidos programáticos de la radio pública y universitaria, representa un proceso dinámico y desafiante. Esta transformación tecnológica avanza a un ritmo acelerado que pone a prueba los modelos organizacionales y operativos tradicionales de las emisoras radiofónicas.
*Responsable Operativo en Universo 94.9 Radio Universidad de Colima y Docente en la Facultad de Mercadotecnia
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