El Real Madrid se clasificó sin dificultades para la Final de la Supercopa al derrotar por 3-0 al Mallorca, que no opuso resistencia ante el poderío ofensivo de los blancos.
Los goles de Bellingham, Rodrygo y un autogol de Valjent sellaron la victoria en un partido que mostró la clara superioridad del conjunto dirigido por Carlo Ancelotti.
Con este resultado, los merengues mantuvieron su racha positiva de victorias, mientras que el Mallorca, que también sufrió la eliminación en la Copa del Rey, no encontró respuesta ante el dominio del campeón de liga. El equipo de Arrasate apenas pudo crear peligro y vio cómo sus esperanzas se desvanecían rápidamente.
Desde el inicio, el Madrid impuso su ritmo de juego. Los primeros minutos fueron de total dominio merengue, con Mbappé y Vinícius creando varias llegadas. Aunque el Mallorca intentó contener el asedio, las incursiones del ataque madridista fueron constantes, destacando una jugada que culminó con un remate flojo de Luis Vázquez tras pase de Vinícius.
A medida que avanzaba el partido, la presión alta del Madrid obligó a los defensores del Mallorca a trabajar intensamente. El estadio, animado por los seguidores saudíes, se encendió especialmente cada vez que Vinícius tocaba el balón. El brasileño, con un duelo particular contra el defensor Maffeo, mostró su habilidad y fue clave en la presión ofensiva.
Con solo quince minutos en el reloj, el Madrid ya había generado varias ocasiones, principalmente de la mano de Mbappé, aunque el portero eslovaco Greif estuvo atento para evitar el gol. El Mallorca, centrado más en la defensa, apenas logró cruzar el medio campo, y cuando lo hizo, el ataque careció de puntería. Un error de Mendy permitió a Dani Rodríguez enviar un centro peligroso a Larin, pero el cabezazo del canadiense se fue desviado.
El Madrid continuó dominando, pero sufrió una baja importante cuando Raíllo, su capitán y pilar defensivo, tuvo que abandonar el campo debido a problemas físicos. Mientras tanto, el equipo de Ancelotti seguía buscando romper el marcador sin éxito, con Vinícius protestando una posible falta dentro del área que el árbitro no consideró para revisión en el VAR.
El segundo tiempo comenzó con un susto para el Madrid, cuando Dani Rodríguez tuvo una oportunidad clara en el área que desperdició. Sin embargo, el conjunto blanco no tardó en retomar el control del partido. A los 63 minutos, un error en la posesión del Mallorca permitió a Mbappé iniciar una contra que terminó con un pase a Vinícius, quien asistió a Rodrygo. El brasileño disparó al poste, pero el rebote fue aprovechado por Bellingham para adelantar al Madrid 1-0.
A partir de ahí, el Mallorca intentó reaccionar con cambios, pero la superioridad del Real Madrid se hizo evidente. El técnico de los bermellones, Arrasate, buscó revitalizar su equipo con la entrada de Samú Costa, quien regresaba de una lesión, pero no consiguió frenar el ímpetu de los blancos. Ancelotti también hizo ajustes, retirando a Valverde para dar paso a Ceballos, buscando dosificar esfuerzos para la final.
La resolución llegó en los últimos minutos. Primero, un centro de Brahim acabó en autogol de Valjent, y en el tiempo añadido, Rodrygo celebró su 24 cumpleaños con un gol que selló el 3-0 definitivo y dejó al Madrid listo para enfrentar al Barcelona en la Final de la Supercopa.
Dayra Gómez