En el marco del Día del Maestro, que se celebra este 15 de mayo, Karent Medina Machuca, directora de la Unidad de Servicios Educativos en Tecomán, destacó que las y los docentes del municipio han ajustado sus estrategias para enfrentar los nuevos retos sociales, dando prioridad a la seguridad escolar y a fortalecer la relación con madres y padres de familia.
En cuanto a seguridad, Medina Machuca explicó que los planteles cuentan con protocolos de actuación ante situaciones externas de violencia, y que el personal docente recibe capacitación continua durante los consejos técnicos escolares. “Los maestros siempre procuramos mantener las puertas cerradas para evitar el ingreso de personas ajenas a nuestras instalaciones”, afirmó.
La funcionaria aseguró que, pese al contexto nacional, las escuelas de Tecomán siguen siendo espacios seguros. “Afortunadamente tenemos una excelente comunicación con el alcalde y con el director de la Policía Municipal, quienes nos han apoyado especialmente durante las vacaciones con rondines de vigilancia para prevenir el ingreso de personas ajenas a los planteles”, señaló.
Afirmó que el personal educativo está preparado para actuar antes, durante y después de cualquier eventualidad: “Contamos con protocolos que, aunque no se dominan completamente, ya son conocidos por los docentes, quienes saben cómo actuar en caso necesario”.
Medina Machuca también subrayó la importancia de fortalecer el vínculo con los padres de familia, especialmente en temas relacionados con la disciplina escolar. Señaló que, aunque existen diferencias de opinión entre docentes y tutores, siempre se busca resolverlas mediante el diálogo.
“En ocasiones surgen discrepancias entre los padres y los maestros en aspectos de la formación, pero se trabaja para llegar a acuerdos que garanticen la satisfacción de los padres con la educación que se brinda”, explicó.
Indicó que las escuelas cuentan con reglamentos internos que regulan tanto el comportamiento del alumnado como la interacción con los padres de familia. “También hay reglas claras sobre los horarios en los que pueden ingresar a las escuelas o hablar con los docentes, ya que mantener las puertas abiertas todo el tiempo podría afectar la calidad de la enseñanza”, añadió.
Reconoció que en algunos casos hay padres renuentes a cumplir con los lineamientos, aunque generalmente existe buena disposición. “La mayoría de los papás, al inscribir a sus hijos, firman una carta compromiso en la que aceptan las normas del plantel, desde los horarios hasta la participación en actividades. En general, son padres muy participativos”, concluyó.

