El Manchester City venció 3-1 al Bournemouth este martes en el Etihad Stadium, con lo que se colocó a un punto de asegurar su clasificación a la próxima Liga de Campeones. Un empate ante Fulham en la última jornada le bastará para sellar el pase, gracias a su mejor diferencia de goles respecto a Newcastle, Chelsea y Aston Villa.
Rodrigo Hernández volvió a jugar después de 8 meses lesionado, tras romperse el ligamento cruzado en septiembre ante el Arsenal. El español disputó los últimos 10 minutos del encuentro y estará disponible para el Mundial de Clubes de la FIFA, que inicia el 14 de junio en Estados Unidos.
Kevin De Bruyne, en su última noche en el Etihad, fue homenajeado con un tifo y ovación de los aficionados. El belga falló un gol sin portero y estrelló el balón en el larguero, pero fue clave en la ofensiva. Bernardo Silva marcó el 2-0 al minuto 63 tras asistencia de Ilkay Gündogan, y Nico González sentenció con un gol al 90.
El City jugó con 10 hombres tras la expulsión de Mateo Kovacic, pero recuperó la ventaja numérica cuando Lewis Cook fue expulsado por una entrada a Nico González. El gol del Bournemouth cayó en los últimos segundos gracias a Jebbison, aunque sin alterar el rumbo del partido.
Bournemouth quedó oficialmente sin posibilidades de clasificar a competiciones europeas para la próxima temporada.

